Ser alcalde de su pueblo fue, es y debería ser un orgullo para aquellos alistanos que un día deciden dedicar su tiempo libre y muchas veces también el reservado a sus familias a trabajar y buscar el progreso y el desarrollo social, cultural y económico para su tierra y sus gentes. Otra cosa es que lo consigan o que pase como en la viña del Señor. Lo que está claro es que a la mayoría, con sus aciertos y sus errores, voluntad, seguro, ni les faltó ni les falta.

Francisco Áñez Bartolomé, de Muelas del Pan, fue innovador y uno de los artífices de crear el Día de la Comarca, hasta que un fatídico accidente de tráfico le segó la vida en la recta de Coreses. En Villalcampo dejó profunda huella Gregorio Domínguez, persona muy acogedora, fallecido mientras ocupaba el cargo. Otro buen ejemplo fue Gregorio Carballés de Mahíde, persona ejemplar como Manuel Miguel, alcalde de Figueruela, fallecido con 32 años en un trágico suceso el 31 de octubre de 2005.

La comarca tuvo alcaldes que marcaron un antes y un después por su manera de ver las cosas, yendo un paso por delante a los demás. Eutimio Contra Galván fue alcalde de Manzanal del Barco, donde consiguió que Iberdrola construyera el puente de "La Galvanera" en los años noventa, que debería haberse construido allá por 1934.

Aliste ha tenido otros alcaldes históricos como Juan Garrido Ferrero (San Vicente de la Cabeza), Francisco Mezquita Ferreras (Gallegos del Río), Jesús Prieto Moral (Rabanales), Miguel Pérez Viguera (Samir) o Basilio Pérez Leal (Viñas), ahora jubilados tras muchos años dedicando su vida a sus pueblos y como ellos o Tomas Carrión, Juan Garrido Carballés, Antonio Faúndez y Pepe Tola, otros muchos, todos dignos de elogio. En unos tiempos donde todos somos necesarios -que no imprescindibles-, los alcaldes y los vecinos tenemos en nuestras manos el futuro de nuestros pueblos, juntos, que no revueltos. El progreso no sabe ni necesita de caudillos o salvadores de la patria, tampoco de enemigos por sistema, sino de alistanos conscientes de que la unión sí hace la fuerza, que lo importante no es la política y los políticos, sino Aliste y los alistanos.