La Denominación de Origen Arribes del Duero espera este año "un cosechón" de uva porque los viñedos han gozado de unas condiciones climatológicas a pedir de boca. El director técnico de la Denominación, Carlos Capilla, resalta las condiciones que presentan los viñedos en el conjunto de la Denominación, y afirma que una cosecha extraordinaria sería aquella "que superara el millón de kilos".

También el vicepresidente del organismo, el fermosellano Manuel Moya, destaca la buena presencia de los viñedos del espacio protegido, con las vides cargadas de producto y con los racimos ya más que visibles. Además, la Denominación de Origen Arribes no sufre los problemas excedentarios que envuelve a otras denominaciones españolas sureñas y que ha llevado al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente y a los bodegueros a buscar medidas para resolver la situación cuando ya se avecina la nueva campaña.

La Denominación de Origen de Arribes cuenta con unas 400 hectáreas de viñedo, está integrada por catorce bodegas (siete de Zamora y siete de Salamanca) y sus vinos, de variedades autóctonas y propios de una tierra de arribanzo, comienzan a ocupar en los mercados una posición al alza. El viñedo, junto con el olivo, es unos de los recursos agrícolas tradicionales que siguen ilusionando a los residentes en el espacio protegido.

Por otra parte, aunque el estado de los viñedos eleva la euforia de los viticultores, en la zona de Villalcampo se ha advertido por algunos propietarios que algunas cepas sufren la quemazón de algunas ramas que les ha generado una cierta preocupación, según informan fuentes locales.