La localidad de Villamayor de Campos ha logrado recuperar el servicio de podólogo, tras más de seis meses de suspensión, después de que el Ayuntamiento dotara con mobiliario especializado un local.

La prestación, muy necesaria para los mayores de la localidad, se oferta en el salón de usos múltiples del Consistorio y cada 40 días un profesional se ocupa de llevarla a cabo.

El alcalde del municipio, Antonio Sanz, explica que amueblar el local «ha tenido un coste de 1.300 euros por parte del Ayuntamiento, más otros 250 euros del lavabo portátil que ha costeado la asociación del club de jubilados». Así, se ha adquirido a una empresa de Benalmádena (Málaga) un sillón de tres motores, un taburete de uso profesional, una lámpara de cinco aumentos y un lavabo portátil, con fin de ofrecer un impecable servicio a los vecinos. El coste de la asistencia es de 10 euros y para disfrutar de él «hay que ser socio del club de jubilados».

Sanz asegura que el servicio del podólogo «es indispensable en un pueblo como el nuestro que cuenta con mucha población envejecida que no puede trasladarse a Medina de Rioseco, Benavente o Zamora para arreglarse los pies, ya que no cuentan con quien los lleve, ni con medios para ello». La supresión del podólogo «hace mucho daño a los pueblos pequeños. Por ejemplo Prado iba a Villanueva, a Villamayor venía gente de Castroverde o Villar de Fallaves, a Villalpando de Quintanilla del Monte o Tapioles y si no se da el servicio cerca es muy complicado para mucha gente».

El primer día que el podólogo Salvador Ausía comenzó a prestar sus servicios en Villamayor contó con la presencia de veinte vecinos y «se espera que el número aumente en visiun tas posteriores, ya que algunos ya habían ido fuera con otros profesionales».

El regidor destaca que este tipo de prestación «es lo que hace que los vecinos estén contentos y no vean como se va abandonando a los pueblos quitándoles de cosas tan necesarias como esto. Por ello el Ayuntamiento intenta inventar todo lo que sea para que no sea así y dar asistencia a los vecinos que permanecen todo el año en el pueblo».

La importancia de este servicio en el medio rural ha hecho que las asociaciones de jubilados de la comarca terracampina reúnan cerca de un millar de firmas para reclamar la reposición del servicio de podología en los pueblos de donde se ha dejado de prestar.