La campaña de extinción de incendios comenzará el día 1 de julio en la provincia de Zamora con una reducción de los efectivos en las cuadrillas de prevención y trabajos selvícolas y en la guardería medioambiental que realiza las guardias en la base de Rosinos de la Requejada, según señalan fuentes de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente.

El personal contratado para las cuadrillas en toda la provincia de Zamora desciende entre 20 y 25 trabajadores al reducirse el número de componentes de las brigadas, que en algunos casos se rebaja de 9 a 7 personas. Los vehículos de transporte utilizados también tienen menor capacidad para trasladar a las brigadas de mayor personal.

El segundo aspecto que se ve afectado por los recortes es la dotación de agentes medioambientales en turnos de guardia dentro de la Base de helicópteros de Rosinos de la Requejada, que dejan de efectuar la vigilancia con las brigadas helitransportadas que venían realizando el trabajo integrados con los turnos de las brigadas aéreas. El resto de guardias se mantiene como en la campaña anterior.

A partir de estas semanas aumentará el riesgo de incendio en la comarca de Sanabria por la abundancia de pasto, por las lluvias de primavera, y la proliferación del matorral. La llegada de un verano irregular con temperaturas más bajas y con lluvias ha retrasado lo que se puede considerar la época de riesgo, que en estos dos últimos días por el calor va en aumento. En principio se mantiene el número de vigilantes en la red de vigilancia desplegada por las zonas de mayor riesgo, reforzada previsiblemente por la entrada en funcionamiento de las cámaras de videovigilancia.

La Federación de Servicios a la Ciudadanía de CCOO, por su parte, denunció ayer en León la disminución de recursos para la defensa del patrimonio natural en las provincias más afectadas por incendios, Zamora y León.

La FSC reclama mayor inversión pública para la extinción. Desde el sindicato se denuncia los cuantiosos daños económicos y la repercusión social de los incendios en las zonas afectadas. La previsión de gasto en materia de prevención y extinción de incendios forestales, por tercer año consecutivo y como consecuencia de la crisis y los recortes, desciende en relación con el gasto que realizaban las Comunidades Autónomas.

En todas las comunidades Comisiones Obreras constata el descenso el número de efectivos dedicados a las tareas de vigilancia y prevención. En cuanto al número de retenes, personal contratado para la campaña estival, siendo similar al del año anterior que ya se demostró insuficiente, un importante número de ellos contará, este año, con menos personal.