Medios terrestres y aéreos trabajan en la extinción de un incendio que se inició ayer entre los términos municipales de Figueruela de Abajo y Moldones. El fuego ha quemado una gran superficie, aún por cuantificar de monte bajo y pinares, y según los primeros indicios pudo haberse iniciado de forma accidental por motores y máquinas que están trabajando en la zona.

El siniestro dio comienzo a las 14.00 horas y dada la extensión del frente y el viento reinante en la zona fue declarado de nivel 1 del Infocal.

El alcalde de Figueruela de Arriba, Carlos Pérez, explicó que en la zona del incendio «se estaban realizando labores de clareos y según los primeros indicios pudiera haberse originado por una chispa procedente de los motores o de los vehículos que trabajan en la zona».

El regidor confirmó que en «ningún momento» las llamas se han acercado a ningún núcleo urbano, aunque el humo era avistado con claridad desde varios kilómetros a la redonda. Pérez subrayó que «está a unos dos kilómetros de Moldones y al principio iba para Figueruela de Arriba, pero el aire que hay en la zona le hizo cambiar».

La importancia del incendio ha hecho necesaria la intervención de una gran número de medios personales y mecánicos para llevar a cabo su extinción. Así, se ha contado con la participación de dos técnicos, cuatro agentes medioambientales, medios aéreos de las bases de Rosinos, Villardeciervos, Villaralbo, Matacán, cuatro bulldozer, tres autobombas, cuatro cuadrillas de tierra y una dotación de bomberos de la Diputación Provincial.

También en el día de ayer un incendio arrasó caso 60 hectáreas de rastrojo y pajas en el término municipal de Manganeses de la Lampreana. El fuego, que dio comienzo a las 14.15 horas, se originó por una negligencia y quedó totalmente extinguido a las 17.15 horas.

Ante tal situación en la provincia, el director general de Medio Natural de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, José Ángel Arranz, recomienda «extremar la precaución» durante los próximos días, ante la inminente llegada a la Comunidad de una ola de calor continental sahariana, que hará que se alcancen los 40 grados de temperatura en diversos puntos de la región.

«Se han previsto además vientos locales importantes, y viento más calor nos conduce a una situación de máxima alerta», explicó. «El verano avanza y la sequía sigue siendo importante, así que no podemos bajar la guardia». La Agencia de Protección Civil de la Junta informó ayer de temperaturas máximas elevadas para los próximos días en todas las provincias de Castilla y León, con máximas de hasta 37 grados centígrados en la provincia de Zamora.