San Martín de Valderaduey ha renovado la totalidad de su alumbrado público tras finalizarse la segunda fase del proyecto.

El municipio cuenta ya con nuevas luminarias y nuevo cableado que vienen a sustituir al instalado hace más de treinta años y que como asegura el alcalde de la localidad, Julio Herrero, «habían comenzado a dar muchos problemas». Asimismo, se ha procedido a aumentar el número de farolas con iluminación de bajo consumo en las calles, colocando algunas «en puntos donde no existían con el fin de que no haya calles sin luz».

Las obras se han llevado a cabo en dos fases, a través de los Planes Provinciales de la Diputación de Zamora, y han tenido un coste de 38.700 y 41.400 euros. La primera parte del proyecto se comenzó a ejecutar en 2010 y las actuaciones, que se iniciaron por la carretera CL-612 que une la localidad con Villalpando, afectaron a la mitad de la población y posteriormente se remodelará el resto.

Herrero asegura que «las farolas consumían mucho y las facturas que llegaban eran desorbitadas. Las de ahora con bombillas de bajo consumo nos van a permitir tener las misma iluminación e incluso mejor con un ahorro significativo para las arcas municipales».

El regidor muestra su satisfacción por haber podido realizar el proyecto « a pesar de los tiempos que corren» ya que la renovación del alumbrado público fue uno de sus principales objetivos cuando llegó al Ayuntamiento de San Martín de Valderaduey.

Los cambios en el municipio han permitido también el cambio de la antigua farola instalada junto a la iglesia parroquial por una de forja con varios brazos de luz .

Por otro lado, el alcalde de la localidad confirmó que el Consistorio «está mirando la posibilidad de instalar una potabilizadora de agua en el municipios con el fin de que los vecinos puedan consumir el agua del grifo».

Según explicó «la red del pueblo está nueva y ya hace tiempo que hicimos un caseto con el fin de poder instalar allí la potabilizadora si llegaba el caso como así ha sido».

Actualmente camiones cisterna de la Diputación Provincial abastecen de agua potable a los vecinos una vez por semana después de que se hallaran fluoruros en unos análisis. San Martín de Valderaduey es la primera vez que tiene un problema por contaminantes en el agua, aunque Herrero confirma que «en el pueblo el agua nunca ha sido de buena calidad. Tiene mucha cal y estropea los electrodomésticos y además, el sabor tampoco es agradable por lo que la mayoría de los vecinos no la bebían, aunque si que se usaba para cocinar».