Las Torres de Aliste se vestía de gala en la tarde del miércoles para honrar a su patrona Nuestra Señora la Virgen de las Nieves. Los festejos iban a empezar, como manda la tradición, con la vigilia, pero hubo cambios de última hora, se hizo con fuegos, y no precisamente artificiales. Cuando el mayordomo y alcalde Feliciano Peláez Junquera ya había dado «La Una», cuarta y última señal para empezar el acto religioso, con los feligreses dentro del templo listos para los cantos y los rezos, hubo de subir de nuevo al campanario a tocar a concejo.

La rapidez del toque delató a los vecinos que algo grave pasaba y con trajes y corbatas salieron a las cercanías del pueblo, entre la carretera Zamora-Mahíde y el cementerio, donde lograban apagar las llamas y así evitaron su entrada en las casas. Todo quedó un susto y cuando llego el helicóptero de Medio Ambiente con el reten, hacia las 19.30 horas, ya estaba bien controlado.

Normalizada la situación, se pasó del deber a la fiesta. La primera jornada estuvo muy animada, con el tradicional pasacalles, a ritmo de gaita de fole y tamboril, al que uno tras otros fueron sumándose los vecinos, hasta convertir el pueblo en un paisaje de colores y sabores. Primero hubo tiempo para los bailes populares y el regalo de caramelos, los niños se lo pasaron en grande, para los disfraces y la petición de ayudas económicas para las fiestas, para terminar en el solar de la antigua casa del cura, con una fiesta culinaria de hermandad donde se ofrecieron y degustaron sabrosos pinchos. Jamaica Show animó la noche.

Ayer, la renovada iglesia San Julián y Santa Basilisa, los barqueros del río Esla, guardianes junto al Aliste. Cumplido con el ritual religioso los vecinos y los emigrantes participaron en el típico baile vermouth y en el tapeo del mediodía bajo los sones de la mejor música tradicional de antaño, mientras los más pequeños se enfrascaban en el concurso de dibujo infantil.

Tute y juegos infantiles fueron animando la tarde hasta la llegada de la hora en que el grupo Doña Urraca hacía una variada y completa exhibición de músicas, cantares y tonadas de otros tiempos aderezados con la belleza que tienen y dan los trajes típicos de la Provincia de Zamora, algunos de ellos, como no de las Tierras de Aliste.

La verbena popular amenizada por el grupo «Radar» concitó el interés y la presencia de numerosos jóvenes de pueblos de Aliste, La Carballeda, Tábara, Alba, Sanabria y de la vecina comarca de Tras Os Montes.

Hoy, continua la fiesta con misa, baile vermouth, música tradicional, campeonato de calva, carrera de zancos y a las 20.30 horas los propios vecinos representarán una obra de teatro bajo la dirección de Obdulia Ríos. El famoso grupo Bumerang animará la velada nocturna.

La tarde del domingo (19.00 horas) Las Torres se convertirá en la capital del folclore con el tradicional Encuentro de Gaiteros donde todos cuantos así lo deseen podrán acercarse hasta allí para participar y mostrar sus dotes ya sea a pie de calle o sobre el escenario. El festival es ya un clásico que atrae a folcloristas para tocar pero también a otros muchos para verlos y oírlos.