La directora del Centro de Hemoterapia y Hemodonación de Castilla y León (CHEMCyL), Lydia Blanco, demandó hoy en Valladolid el incremento de las donaciones de sangre 0 negativo y A positivo al ser tipos que, en la actualidad, están en con las reservas “al límite”.

En todo caso, apuntó que salvo esa necesidad puntual la situación es “buena” aunque sin caer en triunfalismos porque el objetivo es que la comunidad sea “autosuficiente”.

Blanco aseguró que las donaciones durante el primer cuatrimestre de 2017 están ligeramente por encima de las registradas el año pasado pero sin olvidar que Castilla y León precisa la donación de 450 unidades de sangre cada día para poder cubrir las necesidades de componentes sanguíneos de los hospitales.

“Y eso no es fácil de conseguir”, aseveró. De ahí que recordara las 5.400 sesiones de donaciones al año a lo largo de toda la Comunidad para captar más donaciones de sangre.

La directora del CHEMCyL consideró que las reservas de sangre están en unos buenos niveles pero siempre es necesario contar con más donaciones tras fechas festivas como Semana Santa y los puentes del Día de la Comunidad y del Primero de Mayo.

En ese sentido, recordó que las transfusiones de sangre se han reducido en los últimos años un 10 por ciento, tanto en España como en Europa, por la reducción de los accidentes de tráfico y los avances quirúrgicos que reducen el sangrado de los pacientes.

Castilla y León alcanzó el pasado año un índice de 42,50 donaciones de sangre por cada 1.000 habitantes, lo que conllevó superar en 2,5 puntos la recomendación de la Organización Mundial de la Salud (OMS), situada en un 40 por ciento, mientras la media del resto de España supera en poco las 39.