El Ayuntamiento de Benavente ha dado luz verde a la comunicación de inicio de la actividad a la nave de logística del frío del Grupo Olano, que tras su construcción y durante casi dos años ha permanecido activa pese a no disponer de los permisos necesarios.

Después de tres años de trámites, los técnicos municipales han dado el visto bueno a la instalaciones, que ha tenido que adaptarse a la normativa tanto desde el punto de vista urbanístico como ambiental, imprescindible para el ejercicio de la actividad.

Olano solicitó licencia en enero de 2015 y le fue otorgada entonces con condiciones. Sin embargo, los técnicos del Departamento de Urbanismo detectaron que, a pesar de los informes iniciales, la nave no cumplía con los parámetros exigibles para esta dotación ni para ejercer la actividad.

En noviembre, la Junta de Gobierno Local, tras anteriores y reiteradas visitas técnicas, aprobó la concesión de los permisos que han desembocado ahora en la aprobación de la comunicación del inicio de la actividad, lo que otorga a la empresa todas las bendiciones legales.

El último informe técnico, de este mismo mes, constata que la empresa ha presentado el proyecto revisado de la actividad, en el que quedan recogidas las modificaciones puntuales ejecutadas en la construcción del inmueble que sirve de soporte a la actividad y encaminadas al cumplimiento del condicionado de la licencia urbanística y al cumplimiento de la normativa.

En esta nueva lista figuran desde el aumento de número de aseos y vestuarios, la creación de una salida de emergencia adicional y la ejecución de unas pantallas frente a la propagación del fuego al inmueble colindante, hasta modificaciones en la red de saneamiento, actuaciones que, según señalan los informes técnicos, no suponen un incumplimiento de la normativa urbanística ni ambiental.

Tras la comprobación realizada este mes por los técnicos municipales, estos han concluido que el proyecto se ajusta a la licencia concedida y al condicionado establecido en la misma.

El informe técnico también da cuenta de que las instalaciones, cuya licencia ambiental se concedió con condicionantes en materia acústica, no requieren, según una valoración externa, de los máximos legales de vibraciones en el inmueble que pudieran ser comprobables, al no existir los usos que lo harían necesario.

Esta nave del frío ya dispone de autorización de vertido a la red municipal de saneamiento, si bien condicionada a la aportación de documentación sobre la gestión de los residuos generados en la instalación; y con respecto al alumbrado exterior, no se ha proyectado la iluminación de la campa, limitándose a la colocación de pantallas fluorescentes en la parte inferior de la marquesina iluminando los muelles de carga.

El Ayuntamiento ha resuelto en todo caso iniciar un expediente sancionador contra la firma por la presunta comisión de una falta grave al haber ejercido la actividad sin licencia ambiental. Se enfrentaría a una sanción que va desde los 2.000 a los 50.000 euros.