El ropero solidario, una iniciativa que tiene como objetivo cubrir las necesidades de vestido de las familias con recursos escasos, abrirá al público en el bajo de la calle Luarca, en el barrio San Isidro, a partir del día 27. En principio la instalación estará operativa los lunes, miércoles y viernes desde las 10.30 horas hasta la una del mediodía, aunque será la demanda la que marque los días de apertura y los horarios de forma definitiva.

El concejal de Bienestar Social Antonio Vega presentó ayer las dependencias junto a cuatro miembros de la asociación Solidaridad en Acción, que gestionará la entrega y la recogida de ropa.

La Concejalía ha tirado de la base de datos creada a partir de las ayudas a la pobreza hídrica y energética y a otras subvenciones municipales para regular el uso de este ropero solidario. De las 276 familias que reciben ayudas se estima que al menos 50 tienen una verdadera y urgente necesidad de vestido, según Vega.

Al igual que en las ayudas anteriores, se ha fijado un baremo de renta para poder acceder a este servicio. Las familias con ingresos iguales o inferiores a 15.000 euros anuales e podrán beneficiar de este ropero solidario, aunque el baremo contempla límites de renta dependiendo el número de miembros de la unidad familiar.

Toda la ropa donada hasta ahora y la que se entregue en el ropero está inventariada y los datos se renovarán diariamente. Los donantes recibirán una copia de un impreso con las prendas que han entregado, y las personas que reciban prendas tendrán primeramente que inscribirse en la Concejalía de Bienestar Social y cumplimentar un documento.

La mecánica, una vez inscrita la familia y emitido un informe por la trabajadora social municipal, será sencilla. Los demandantes tendrán que especificar que ropa necesitan (para adulto, niños, mujeres, además de las tallas y el tipo de ropa). La demanda generará una ficha, y esta a su vez el pago de las prendas, que será de 50 céntimos de euros cada una. El pago se realizará en la Tesorería municipal y una vez realizado se podrá recoger la ropa en calle Luarca con esa ficha.

En tres casos concretos la ropa será gratuita: cuando las familias tengan una renta inferior a 1.800 euros; para los asociados a Solidaridad en Acción que cumplan los requisitos establecidos en las bases del ropero solidario, y para las familias que soliciten prendas de 0 a 3 años.

Las prendas entregadas no se podrán vender en ningún caso. Habrá un registro histórico de las prendas y el citado inventario. Estos datos permitirán conocer que tipo de prendas se demandan más y determinará si es preciso realizar campañas selectivas de petición de prendas.

Cada familia, dependiendo del número de miembros, podrá solicitar de 2 a 12 prendas cada vez y el periodo de solicitud será de una vez al mes en otoño y en invierno y una vez cada dos meses en primavera y ene verano.

El ropero solidario ha arrancado con las donaciones realizadas por la población a través de establecimientos y Benavente "se ha volcado con el proyecto", según explicó ayer una de la voluntarias de la asociación Solidaridad en Acción.