Una treintena de quintos y quintas del 1966 de Santa Cristina de la Polvorosa celebraron sus 50 años de vida conmemorando los años de mocedad y de niñez.
Durante un fin de semana los jóvenes ya entrados en canas organizaron un programa de actividades donde primaba el encuentro y la convivencia.
La fiesta de hermandad de los quintos del 66 en Santa Cristina no dejó de contar con momentos emotivos como el recuerdo a los fallecidos. En su memoria se protagonizó una ascensión del altura instalando un ramo de flores y una cinta en su memoria en la viga que sujeta la pareja de mayos instalados por la mocedad.
La ocasión sirvió tambien para homenajear a los quintos supervivientes del autobús de los niños de Vigo que se precipitó sobre las aguas del río Órbigo en Santa Cristina de la Polvorosa y de los que han fallecido su mayoría.
El programa festivo contó con comidas de convivencia, desfiles por las calles y una fiesta nocturna original en la que se organizó un festival de música rok y pop de los 80 cuyos músicos utilizaron los instrumentos hechos por Fidel, un quinto del grupo que empleó para su elaboración materiales de reciclado y de madera.
La coincidencia de la época estival ha propiciado el encuentro de este grupo de "mozos" con medio siglo de vida a sus espaldas.
