Santa Croya de Tera se erige, una vez más, en una de las localidad de la comarca que logra reunir a un numeroso público durante las actividades programadas con motivo de sus fiestas en honor a san Cayetano. La numerosa asistencia a los actos organizados durante el fin de semana y sin incidencias a destacar hace que el propio alcalde, Juan José Arenas, extienda su felicitación a los vecinos. Y no es para menos, porque la comisión festiva de la mano del joven concejal Ángel Vega se lo ha trabajado para que todo se resolviera con satisfacción.

Esta localidad ribereña del Tera cerraba los festejos el domingo con el descenso de los barcos locos, esos artilugios flotantes sin motor que surcan las aguas desde su amarre en "los rederos" hasta sobrepasar el puente. Ya en su XIII edición, el original descenso de estas plataformas sobre las aguas, reúne a numerosos vecinos de las localidades de la zona para contemplar un espectáculo lleno de imaginación. Una docena de barcos locos donde no faltaron recreaciones de oficios antiguos como las lavanderas o del oficio religioso con los ramos de las roscas e, incluso, la conmemoración del centenario de Cervantes recreando las figuras de don Quijote y Sancho. Una animada sesión de baile junto al bar Vara y la verbena con la orquesta Malibú Show pusieron el broche final.

No obstante, Santa Croya ha venido preparándose ya desde el pasado miércoles para celebrar sus festejos patronales con actuaciones musicales en el bar del chiringuito. Una operación bocata se organizaba en esa misma jornada y se sucedía el programa de actos con sesiones de cine al aire libre, juegos, concursos o el desfile de peñas donde la sangría llegaba a regar a los participantes en la comitiva. El Día Grande, el sábado, dedicado a san Cayetano, se rendía homenaje al patrón con una misa. Una actuación del Grand Prix lograba reunir a numeroso público en el campo de fútbol y no podían faltar las actuaciones folclóricas o, claro está, las populosas verbenas y los originales disfraces.