El Toro Enmaromado del sábado, el denominado Toro de las Peñas, ha venido para quedarse y formará parte del programa de fiestas de 2017 "salvo que haya algún tipo de impedimento". Así lo aseguró ayer la edil de Fiestas, Patricia Martín. "Lechugazo" dejó buen sabor de boca y aunque uno de los objetivos, el de crear un atractivo turístico para atraer más visitantes el fin de semana no se cumplió, "desde luego hubo más gente en la ciudad que hace un año". "Resultó bien y nuestra intención no era tampoco la de que se masificará y que hubiera más gente que el miércoles", agregó la edil.

Así las cosas, con la Semana Grande de 2016 aún caliente, la intención de que el programa se repita en este punto parece haberse convertido en decisión. Martín Guerra valoró positivamente el resultado de los festejos. "Todo ha salido bastante bien aunque siempre hay cosas que pulir y que mejorar, por ejemplo la degustación popular en la que confiamos en lograr una mayor implicación de las peñas, o la becerrada, para lograr que la plaza se llene", explicó.

Fiestas se ha gastado en esta Semana Grande 165.000 euros sobre un presupuesto de 175.000 más el remanente de 4.000 euros de las fiestas de 2015. La cifra es aproximada y está pendiente de cierre pero según la también edil de Hacienda, no variara demasiado.

El pliego taurino y el Enmaromado "Pitarroso" se llevan la parte de león del gasto. Todos los astados y "Pitarroso" han supuesto un desembolso de 45.000 y 7.500 euros respectivamente. A la zaga le han ido las orquestas que han amenizado las verbenas de esta Semana Grande. El gasto es de casi 40.500 euros, una cantidad ligeramente alejada no obstante de los 59.000 euros desembolsados hace un año.

La tercera partida en importancia tiene que ver con los seguros obligatorios. El jueves, tras la carrera accidentada de Pitarroso, que se cobró cuatro heridos, tres de ellos por asta, el Ayuntamiento atendió a las familias de las víctimas, que evolucionan favorablemente, especialmente el joven que sufrió un neumotorax por aplastamiento y fue derivado al Clínico de Valladolid.

Este año el Ayuntamiento ha invertido 6.000 euros en WC portátiles. Se han adquirido 35 unidades, aunque el esfuerzo realizado no ha servido para frenar el incivismo. Se colocaron media docena en El Ferial durante la verbena multitudinaria de Panorama, otros cinco en la plaza de toros, y se repartieron otros 24 en el resto de la ciudad. Sin embargo la imagen de personas orinando en la calle ha sido habitual. Fuentes municipales explicaron que en 2017, tras una campaña de concienciación, se aplicará la ordenanza cívica a quienes sean sorprendidos.