Azucarera trasladará el próximo año la producción de azúcar líquido de sus instalaciones situadas en la localidad vallisoletana de Peñafiel a la fábrica de Toro. El presidente del comité intercentros de la industria, Félix Feo, confirmó que el traslado se llevará a cabo el próximo año y, aunque no se ha concretado la fecha, en principio podría materializarse en el mes de marzo. No obstante, señaló que Azucarera ya ha iniciado la construcción de unas nuevas naves en el interior de la fábrica toresana para implantar la producción de azúcar líquido, naves a las que también se trasladará parte de la maquinaria utilizada en Peñafiel. A la espera de que la industria aporte más datos sobre estos "cambios organizativos", según Feo, la inversión que Azucarera tiene previsto destinar a materializar el trasvase podría rondar los tres millones de euros.

De otro lado, el presidente del comité intercentros remarcó que el trasvase previsto para el próximo año, supondrá el desmantelamiento definitivo de la planta que la industria posee en Peñafiel, en la que únicamente se mantenía la línea de producción de azúcar líquido, después de que la industria decidiera cerrar las puertas a la recepción de remolacha y a la molturación del cultivo, una vez finalizada la campaña del 2008 y tras acogerse a la OCM del sector. En este punto, Feo reconoció que la decisión de trasladar la línea de producción de azúcar líquido perjudicará a Peñafiel ya que supondrá el cierre definitivo de la planta aunque, en principio, los seis trabajadores de la industria empleados en la fábrica vallisoletana serían reubicados en Toro por lo que podrán mantener su empleo.

En el plano opuesto se sitúa la fábrica toresana, ya que el traslado de la producción de azúcar líquido evidencia, para el presidente del comité intercentros, que Azucarera ha decidido "apostar por Toro", lo que garantiza la estabilidad de la planta que, en los últimos años, se ha consolidado como la más importante de la zona norte, por la cantidad de remolacha que recepciona y por su creciente capacidad de molturación. De hecho, en la presente campaña la fábrica toresana recogerá cerca de la mitad de las toneladas de raíz contratadas por la industria en las tres fábricas de la zona norte, aforo total que alcanza 1.600.000 toneladas. No obstante, como apuntó Feo, es probable que la implantación en Toro de la línea de producción de azúcar líquido genere "algún puesto de trabajo más en la zona".

En cuanto a la cantidad de azúcar líquido que podría producirse en la planta toresana, Feo reconoció que "varía cada campaña", ya que "dependerá de los contratos" que Azucarera pueda cerrar con industrias que demandan este producto. Las aplicaciones de este producto son diversas, aunque este tipo de azúcar se utiliza en diferentes industrias dedicadas a la elaboración de zumos, bebidas carbonatadas, bebidas alcohólicas, lácteos, numerosas salsas y una amplia gama de productos sólidos.

Por otra parte, el presidente del comité intercentros destacó que la decisión de producir azúcar líquido beneficiará a la planta toresana en "momentos complicados" y de cierta incertidumbre en el sector remolachero por la supresión, durante la próxima campaña, del sistema de cuotas o la decisión de incrementar el impuesto que grava las bebidas azucaradas y carbonatadas.

La implantación de la producción de azúcar líquido supondrá un espaldarazo definitivo para la Azucarera toresana que, en los últimos años, se ha consolidado como una de las empresas más importantes de la ciudad, no solo por los puestos de trabajo directos, que se incrementan notablemente en campaña, sino también por los indirectos que genera y porque es uno de los centros principales de recepción de remolacha del país.