El zamorano que tuvo al papa como jefe en Perú

El zamorano Santiago Villarino coincidió en su etapa como misionero en Perú con el nuevo Papa León XIV e incluso llegó a estar a sus órdenes cuando Prevost fue administrador apostólico de la Diócesis del Callao. Este sacerdote del arciprestazgo de Benavente-Tierra de Campos detalla sus impresiones del nuevo sumo pontífice.

Santiago Villarino, en el salón parroquial de Cristo Rey, en la tarde de ayer, tras elegirse el nuevo papa. | J. N.

Santiago Villarino, en el salón parroquial de Cristo Rey, en la tarde de ayer, tras elegirse el nuevo papa. | J. N.

Zamora

"Una persona simple, sencilla, cercana, amiga de los jóvenes y preocupado mucho por las vocaciones". Así define al nuevo Papa León XIV un zamorano que tuvo a Robert Prevost como jefe en Perú.

Santiago Villarino Matellán, actual párroco del arciprestazgo de Benavente-Tierra de Campos, donde está al frente de las parroquias de Villárdiga, San Esteban del Molar, Cerecinos de Campos, San Marín de Valderaduey y Cañizo, coincidió con el nuevo papa durante su etapa como misionero en Perú. En el año 2020 lo tuvo como "jefe" y al año siguiente lo conoció en persona en un encuentro con jóvenes del seminario del que el zamorano era rector.

Santiago Villarino, que este viernes ha madrugado para viajar a Roma, en una peregrinación a Italia que tenía programada con antelación, tiene paralelismo con el nuevo Santo Padre porque ambos fueron misioneros y vivieron en Perú durante más de dos décadas.

El nuevo papa, en un acto de su etapa como prelado peruano, con el zamorano Santiago Villarino en segunda fila.

El nuevo papa, en un acto de su etapa como prelado peruano, con el zamorano Santiago Villarino en segunda fila. / Cedida

De hecho, el sacerdote que nació en Zamora y se crio entre los barrios de Los Bloques y La Candelaria, con Cristo Rey como su parroquia de referencia, pasó nada menos que 25 años en tierras andinas antes de regresar a Zamora por motivos de salud. En Perú estudió Teología y continuó quince años como sacerdote antes de su regreso a la Diócesis de Zamora.

El cura zamorano, que fue rector de un seminario peruano, declara a LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA que tiene "la esperanza de que León XIV contribuirá a acercarse a la gente para que la fe de la iglesia se incremente, se acreciente y que tengamos una luz de esperanza todos los católicos". Frente a la "tristeza y tinieblas" que ha sentido la Diócesis de Zamora por el fallecimiento del párroco Javier Prieto, a cuyo funeral Villarino asistió ayer en Toro, el sacerdote zamorano que estuvo a las órdenes de Robert Prevost resalta "la luz que nos va a dar este nuevo papa con su ardor misionero, como agustino, pero siendo misionero".

Fuera de las quinielas

Santiago Villarino reconoce que inicialmente Prevost no estaba en sus quinielas como papa y detalla que aunque también tiene la nacionalidad peruana, ya que era una condición para ejercer el ministerio episcopal en ese país, Prevost tenía "rasgos físicos de gringo" y allí se le consideraba como tal por ser estadounidense y entonces Villarino desconocía que también tenía ascendencia española.

Sobre si se muestra sorprendido y contento por su elección, Villarino admite que está alegre porque ya hay nuevo papa y si está sorprendido es "porque lo he llegado a conocer y a estar con él. Dios va por delante y me va sorprendiendo con pequeñas cositas", admite.

El viaje que este viernes inicia a Roma, donde estará hasta el domingo con otros seis zamoranos, le permitirá estar en el Vaticano en un momento histórico. A buen seguro, algunos de sus compañeros de viaje, de las Comunidades Neocatecumenales, llevarán alguna bandera de Zamora para identificar sus orígenes, aunque Santiago Villarino, fiel a la tierra en la que ha vivido hasta hace algo más de tres años, confiesa que irá con una del Perú. En ese país, conoció a Prevost en 2021 en un encuentro al que acudió con jóvenes seminaristas en la ciudad de Chiclayo. Entonces lo vio como un hombre "amable, muy cercano y muy interesado por los sacerdotes y los jóvenes". Este fin de semana, quizá vuelva a verlo, aunque sea de lejos en la plaza de San Pedro, ya como papa León XIV.

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