El sector hotelero no remonta y pierde 5.000 viajeros en el primer trimestre en Zamora

El sector hotelero de la provincia sigue acusando el cambio de modelo de los viajeros, que cada vez optan más por alojamientos extrahoteleros como viviendas de alquiler turístico, habitaciones en casas particulares o autocaravanas y eso se traduce en unos peores datos de ocupación en los alojamientos clásicos de acogida de visitantes.

Prueba de ello son los datos del primer trimestre del año dados a conocer por el Instituto Nacional de Estadística, que, aunque distorsionados por el hecho de que el año pasado la Semana Santa cayó en marzo, mantienen una tendencia a la reducción de la ocupación hotelera reflejada también en febrero y en enero, en comparación con los mismos meses del año anterior.

Todo ello después de que el año 2024 también se cerrara en los establecimientos hoteleros de la provincia con cifras en negativo, ya que el pasado año hubo casi un 2% menos de pernoctaciones y en el primer trimestre de este año continúa la tendencia al decremento, siempre según los datos de coyuntura turística hotelera que los propios establecimientos facilitan al INE.

En el primer trimestre de este año, la caída en viajeros se cifra en el 13,3% y en pernoctaciones en el 18,2%. En cifras absolutas eso supone que ha habido más de cinco mil viajeros menos que en el primer trimestre de 2024, hasta un total de 33.435 este año; y unas 12.500 pernoctaciones menos (la mitad en marzo), con un total de 55.875.

Un centenar de habitaciones y once negocios más que en 2024

Al margen del "efecto Semana Santa", Zamora presentó en el mes de marzo los segundos peores datos provinciales de Castilla y León, en caída porcentual tanto de los viajeros como de las pernoctaciones con respecto al mismo mes del año pasado. Únicamente, Ávila presentó peores datos, con caídas del 25 y del 28% en pernoctaciones y viajeros, respectivamente, en la provincia abulense, mientras que en Zamora la caída porcentual se cifró en el 16% en turistas y el 20% en número de pernoctaciones.

Ello pese a que en marzo de este año había once establecimientos hoteleros más que en marzo de 2024, hasta alcanzar los ochenta. También se ha incrementado el número de habitaciones en un centenar, al pasar de 1.507 el año pasado a 1.600 en marzo de 2025, mientras que las plazas se elevaron de 2.892 a 3.079. Ese aumento de la oferta, unido a las fechas de celebración de la Semana Santa, han hecho que el grado de ocupación por habitaciones bajase en siete puntos, hasta el 31,4% y el personal empleado pasase de 420 a 355.

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