Un millar de zamoranos ha suscrito un testamento vital para sus últimas voluntades

Es una de las provincias de la región donde más crece el registro de instrucciones previas

Unas Jornadas sobre Testamento Vital en Zamora.

Unas Jornadas sobre Testamento Vital en Zamora. / Archivo

Carlos Gil Andrés

Carlos Gil Andrés

Un millar de zamoranos tiene testamento vital, es decir, ha inscrito sus últimas voluntades en el denominado Registro de Instrucciones Previas de la Junta de Castilla y León para dejar clara su decisión sobre una prolongación artificial de la vida o el destino de sus órganos en caso de fallecimiento.

En Zamora han sido 158 las personas que han suscrito el testamento vital en el último año, una cifra importante, ya que es un 81% superior a los 87 del año anterior. Es la segunda provincia donde más ha crecido, después de Soria.

Sin embargo Zamora es, con Ávila y Segovia, la provincia con menos testamentos vitales por cada mil habitantes, solo 6,7, frente a los 9,8 de media de la comunidad o los 11,6 de Burgos.

De los tres procedimientos posibles para formalizar un documento de instrucciones previas, ante notario, ante tres testigos o ante personal al servicio de la Administración, fue esta última la opción más elegida por los otorgantes en el año 2023, al igual que en los últimos años. 110 zamoranos optaron por la Administración, 26 por los testigos y 22 decidieron recurrir al notario para atestiguar la veracidad del documento de Instrucciones Previas.

Son las mujeres más previsoras que los hombres, en Zamora hay dos féminas con testamento vital por cada varón.

Los 60 años es la edad más habitual para plantearse formalizar el testamento vital en Zamora, un rango muy similar al del resto de las provincias de la comunidad autónoma, según los datos que acaba de hacer públicos la Consejería de Sanidad correspondientes a 2023.

Previsiones

Para que un documento de instrucciones previas (que es la denominación que tiene el testamento vital en Castilla y León) se considere como tal, debe contener, como mínimo, indicaciones sobre los cuidados o tratamientos médicos que se aceptarían o rechazarían si se estuviera en determinadas situaciones clínicas, en general con un pronóstico irreversible y que evolucionará hacia la muerte en un periodo más o menos cercano, o indicaciones sobre el destino del cuerpo o de los órganos una vez llegado el fallecimiento.

En el año 2023, la mayoría de los documentos recogen de manera conjunta instrucciones, tanto respecto a los cuidados y tratamientos sanitarios como al destino de sus órganos o el cuerpo una vez fallecidos. La opción doble es la elegida por el 86,5% de las personas que suscribieron testamento vital.

Las personas que tienen otorgado un documento de instrucciones previas pueden, en cualquier momento, sustituirlo de acuerdo con los procedimientos establecidos en la normativa vigente y también tienen la posibilidad de anularlo y dejarlo sin efecto. Sanidad ha depurado el registro para evitar duplicidades en caso de que el documento inicial se haya modificado.

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