Club LA OPINIÓN-EL CORREO: El "desconocimiento", la razón que frena el cambio en las cofradías

Javier Fresno propone medidas "sencillas" para que las hermandades se adapten a los tiempos

ZAMORA.CLUB DE LA OPINION

ZAMORA.CLUB DE LA OPINION / Alba Prieto

Beatriz Blanco García

Beatriz Blanco García

"Las cofradías se han reinventado muchas veces a lo largo de la historia, no tiene nada que ver una hermandad barroca con una penitencial o medieval, ni siquiera una romántica de la Semana Santa zamorana. Son momentos muy diferentes y las cofradías son ejemplos de saber reinventarse a lo largo del tiempo", señala Javier Fresno Campos.

El sacerdote, delegado de Religiosidad Popular, presentó ayer en el Club LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA el libro "El cambio y lo esencial. Itinerario para repensar las cofradías en el siglo XXI", donde desgrana "propuestas sencillas ante los problemas que tenemos en este momento. No es que vayamos a pasar a ser una minoría social perseguida, pero se trata de saber utilizar las cartas que tenemos en este momento. Más allá de que Dios nos acompañe siempre, también nos toca a nosotros hacer una tarea en este momento", argumenta.

Resistirse al cambio

Lejos de pensar que aquellos que se resisten al cambio lo hacen por sentir que se pierde la esencia de las cofradías, Fresno considera que la razón es "el desconocimiento de lo que es esa esencia de una cofradía. Si uno lee la historia, se han reinventado mil veces. Pensar que lo que hemos conocido durante quince años es el no va más de este mundo... Ha habido mucha más historia y hay que ser fieles a la historia de verdad", considera.

El libro que se presentó en el foro del periódico nació de una "reflexión compartida", en el seno de la comisión de los encuentros nacionales de cofradías. "Empezó también en un momento concreto, durante y después de la pandemia, sacando a la luz un problema más amplio, notando que la gente ha cambiado, se ha vuelto más individualista, más perezosa", describe.

Visiones diferentes

Sin embargo, descarta la visión más negativa de esos momentos. "La comisión de conferencias episcopales de Europa publicó que estos cambios suponían un avance gigantesco hacia el proceso de secularización, incluso algunos anunciaron que se acababa la Iglesia y la religión de masas. Pero hemos comprobado que esto no es así, lo que sí puede haber cambiado es que la religión tenga el monopolio social de la verdad. Cada uno tiene su propia visión y nadie puede culpar o denunciar al otro por no tener el mismo punto de vista", señala el delegado de Religiosidad Popular.

Aun así, y por su experiencia, reconoce que otras ciudades no están más adelantadas que Zamora en esta necesaria reconversión. "En todas es necesaria una reflexión hacia un tiempo nuevo que ahora mismo estamos inaugurando", afirma para finalizar.