Un zamorano gana la batalla a la tarjeta revólving

"La falta de transparencia a la hora de fijar y establecer los intereses remuneratorios", "usurarios" aplicados a las compras del titular de una tarjeta revólving y las condiciones de difícil comprensión para el usuario han permitido a la Audiencia de Zamora liberar a un zamorano de un producto que le causó un perjuicio económico, una sentencia que confirma la dictada en septiembre de 2022 por el Juzgado número 5 de Zamora e impone las costas del juicio al banco.

La sentencia, que anula el contrato, cuestiona que el consumidor "pueda prestar su consentimiento con conocimiento de todos esos elementos" que lo conforman, las condiciones de devolución de las cantidades que gaste el titular para realizar compras aplazadas, ya que la cláusula sobre los intereses se recoge en letra demasiado pequeña y en un anexo que no se detecta con facilidad.

"No puede concluirse", indica, "que el consumidor contratante haya podido formarse un juicio de valor sobre los elementos esenciales del contrato, su contenido y sus consecuencias". En ese mismo sentido, el Tribunal provincial subraya que "todas las cláusulas que regulan el precio, su cálculo, los intereses aplicables en caso de impago y las comisiones o sanciones ante incumplimientos del consumidor se encuentran incluidas en un clausulado extenso". Y en un documento "con letra minúscula y muy junta que es de difícil lectura y más de comprensión para un consumidor medio" que carece de formación en esa materia.

Un juez zamorano limita la devolución de intereses de una tarjeta “revolving”

Al no haber demostrado la entidad bancaria que hubiera informado sobre el funcionamiento de la tarjeta, "la línea de crédito, los intereses que se le cargarían en caso de aplazamiento de sus disposiciones". Asimismo, el magistrado y las dos magistradas que han estudiado el asunto agregan que la entidad financiera tampoco ha explicado al usuario "que cuanto más bajo fuera el importe de devolución de lo dispuesto, más intereses debería satisfacer porque estaría utilizando un crédito mayor". El abogado del zamorano que ha logrado una sentencia favorable, Roberto Gómez Calles, pone el acento en una disposición judicial que viene a marcar la línea a seguir por la Audiencia en este tipo de causas, ya que "en otras audiencias las sentencias han sido contrarias a estos criterios".

Los usuarios de tarjetas revolving tendrán que saldar la deuda pendiente aunque el banco devuelva los intereses

La sentencia, valorada muy positivamente por el letrado, recrimina a la entidad bancaria que "el interés pactado no se destaca" con suficiente facilidad en el contrato suscrito por el consumidor, al hallarse "en un apartado que se denomina anexo", dentro de "un clausulado redactado en letra excesivamente pequeña y junta".

El banco utiliza una grafía que "dificulta la lectura y la comprensión de las distintas cláusulas, sobre todo, lo relativo a la forma de pago y como se realiza el cálculo para determinar la liquidación" de cada uno de los plazos de pago.

Recuperar lo pagado de más en intereses y comisiones

El usuario zamorano recuperará todo el dinero que pagó y "excede del total del capital que le haya prestado". Para calcular la cantidad, la sentencia ordena que se tenga en cuenta "el total de lo ya recibido por todos los conceptos cargados y percibidos al margen de dicho capital y que ya hayan sido abonados por el demandante con ocasión del citado contrato".

Hace especial referencia a las cuantías cobradas por los "conceptos de comisión por disposición de efectivo, intereses, comisión por reclamación de cuota impagada, y cuotas de seguros asociados a la línea de crédito", así como los intereses legales. La cantidad total se indicará en ejecución de las sentencia por parte de la Audiencia que ya es firme. En cuanto a la jurisprudencia, se está a la espera de lo que resuelva el Tribunal Europeo al respecto.

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