Rearasa ejecutará la rehabilitación del Puente de Piedra de Zamora por 1,3 millones

El proyecto de Francisco Somoza cambia las barandillas actuales por un pretil de sillares de arenisca parecidos a los que tuvo el viaducto

El puente antes de la reforma de 1905, con el pretil de piedra, la torre y el arco número 16, hoy tapado.

El puente antes de la reforma de 1905, con el pretil de piedra, la torre y el arco número 16, hoy tapado. / L.O.Z.

Carlos Gil Andrés

Carlos Gil Andrés

La mesa de contratación ha acordado adjudicar a la empresa zamorana Restauración de edificios, artesonados y retablos, Rearasa, el proyecto de reposición del pavimento, ejecución del nuevo pretil y renovación del alumbrado público en el Puente de Piedra de Zamora por un importe de 1.365.296 euros y un plazo de ejecución de ocho meses.

Se trata de una obra importante, ya que va a cambiar radicalmente la imagen que tenemos del puente actual, sobre todo debido a la desaparición de las barandillas, sustituidas por unos pretiles (muros) de piedra arenisca, al modo de los que tuvo antaño en viaducto.

Las obras consisten en desmontar la actual barandilla metálica, las farolas, el cableado y los elementos complementarios de señalización existente y la demolición del pavimento actual para a continuación construir un nuevo pretil de piedra "en consonancia con las características constructivas y formales del puente, adecuándolo a las características actuales de funcionalidad de la vía, principalmente peatonal y la colocación de la nueva iluminación en el nuevo pretil".

Principales cambios

Desparecerá por tanto la barandilla de hierro y también las farolas, sustituidas por una iluminación integrada en el muro de piedra del puente.

Destacan en el proyecto que el pavimiento (realizado el losas de granito y adoquines de cuarcita) tendrá diferentes tonalidades para marcar dónde estuvieron las torres del portazgo, el Peromato y la Gobierna, destruidas cuando el Puente de Piedra cambió su fisonomía con el fin de adaptarlo al tránsito de vehículos o la capila de la Virgen de la Guía.

También se prevé el drenaje del puente compuesto por 14 puntos con sumideros y desagües horizontales en forma de gárgola de piedra arenisca de Zamora, similar a la existente, unos elementos que también tuvo el puente. El pretil que sustituye a la barandilla será de piedra arenisca, compuesto por cinco hileras de piedra que en conjunto medirán 110 centímetros de alto por cuarenta de ancho.

En los accesos al puente se mantendrán las farolas existentes, aunque reubicadas con el fin de lograr mejor iluminación.

Una construcción del siglo XII que ha sobrevivido

El Puente de Piedra actual, construido en el siglo XII, vino a sustituir el anterior, que databa de un siglo antes pero que se derrumbó. Los dos coexistieron. Ambos llegaron a coexistir durante años. Se trata de un puente construido de tal forma que acentúa su carácter defensivo de la ciudad, de ahí las torres del Peromato y La Gobierna y la embocadura de Salamanca con una pequeña curva, que dificultaba el triunfo de un ataque frontal. Estas torres permitían también controlar quién entraba y salía de la ciudad y cobrar los correspondientes impuestos.

La reforma que ha durado poco más de un siglo

Entre los años 1905 y 1907 se llevaron a cabo los trabajos de la importante reforma del Puente de Piedra acometida por el ingeniero de Caminos Luis de Justo que supuso una profunda transformación del viaducto y su adaptación al tráfico rodado que ya no se componía solo de carros, sino que se abría a la aparición del automóvil.

En estos trabajos se demolieron los pretiles de piedra y los torreones, se repararon las bóvedas y los tímpanos de los arcos 9 y 10 y 12 y 13, se repararon los arcos 11 y 14, se construyeron andes, barandilla y afirmado para los arcos 9 al 14 y se repararon por completo los arcos 4 al 8.

En esta numeración el arco número 1 sería el más próximo a la margen izquierda y el número 16 el más cercano a la ciudad. Este arco número 16 en principio estaba previsto repararlo aunque al final se construyeron unas rampas de acceso al puente que dejaron oculto esta parte del viaducto. Son las rampas que llegan desde la avenida de Vigo y desde la avenida del Mengue que confluyen en el ensanchamiento de la calzada que permitía el acceso del tráfico rodado al puente. Esa especie de muros circulares que hay en el inicio del puente fueron construidos en esa época, donde también quedaron bajo el nivel de la calle algunos edificios.

Finalmente se repararon los primeros arcos, el 1, 2 y 3. Durante todo ese tiempo el puente estuvo en uso hasta que hace una década la puesta en servicio del Puente de los Poetas permitió que el viejo viaducto se librara del tráfico y se convirtiera el peatonal. Ahora va a experimentar una nueva transformación en la que se pretende recuperar su esencia.

Suscríbete para seguir leyendo