La grave situación del país —a la que se suma el reciente asesinato de su presidente, Jovenel Moïse— hace de Haití un territorio donde se complica todavía más trabajar en el plano de la ayuda humanitaria. Pero todo ello no ha sido obstáculo para la zamorana María Redondo, que esta semana viajaba de nuevo a la localidad de Anse-à-Prites, donde con su ONGD Visión Solidaria tiene en marcha desde hace años un campamento de verano para niños de entre cuatro y 16 años, a través del proyecto Así Soñamos.

El pasado año no pudo acudir a su cita anual con la solidaridad en Haití a causa de la pandemia, pero la organización estuvo presente con labor asistencial y de ocio en las calles para los más pequeños. Este verano regresa si cabe con más ganas y añadiendo nuevas iniciativas al proyecto. Una de las principales es que a la habitual comida que se ofrece en el campamento se añade este año el desayuno para los participantes. “Era algo que teníamos en mente desde hace años, porque sobre todo el grupo de los más pequeños llegaba desfallecido por las mañanas, ya que solo hacía una comida al día, la que le dábamos nosotros”, asegura la cooperante zamorana.

Niños del campamento, en una actividad de plantación. | Cedida

Y es que entre el calor, la humedad del ambiente y tan solo una ingesta al día, el desayuno se convertía en una necesidad de vital importancia. “Además, este año ha sido muy duro para ellos, porque por la pandemia no han tenido escuela, que es donde suelen comer, así que el nivel de desnutrición ha aumentado, por lo que no podíamos no hacer este esfuerzo para poder darles el desayuno en esta nueva campaña”, razona.

Un esfuerzo que es mucho mayor teniendo en cuenta que en estos meses en el país ha aumentado el precio tanto de los alimentos como del combustible o el transporte, lo que les ha obligado a reducir el número de niños a dos turnos de 90 menores, en vez de los 250 habituales. A todo ello, hay que añadir también los problemas derivados del propio COVID, que obligará a que tengan que acostumbrarse a las mascarillas. En este sentido, la empresa Ángel Iglesias ha colaborado con la ONG con las suyas, ya que están colaborando este año con el proyecto.

Así Soñamos no solo beneficia a los más pequeños de la comunidad haitiana, sino que significa una oportunidad de trabajo para los adultos, pues la idea es que se convierta en un programa lo más autónomo posible en un futuro próximo, por lo que se realizan contrataciones a gente de la zona para labores de educación, cocina, logística, transporte o limpieza. “Tenemos un equipo de treinta personas que tienen un sueldo y que además sienten la satisfacción de estar aportando a su propia comunidad”, valora la zamorana, que agradece sobre todo la colaboración de los socios de la ONG que sigue aportando para que el proyecto crezca . Aquellos que se animen a colaborar, pueden hacerlo a través del número de cuenta ES78 3058 5502 0327 2000 7026, en la web de la propia ONG (www.visionsolidaria.org) o a través de Bizum, entrando en la interface del banco e introduciendo el código 03352 la cantidad que se desee. Un pequeño gesto que aporta mucha vida al otro lado del Atlántico.