El riesgo de pobreza en Zamora se encuentra polarizado y son los hogares unipersonales y aquellos con cinco miembros o más los que tienen un mayor riesgo de caer en esta situación. Las tasas más elevadas se registran en los hogares formados por una única persona de menos de 30 años, seguidos de los hogares monoparentales y los compuestos por dos adultos y tres o más niños dependientes. En estos tres supuestos se encuadran la mayoría de los casos de pobreza en Zamora. Según indica el Consejo Económico y Social de Castilla y León el 20% de los hogares de la provincia sufre riesgo de pobreza, entendiendo esto como tener unos ingresos inferiores al 60% de la renta media de la provincia. De ellos, la mitad se encuentra en riesgo de pobreza severa, con unos ingresos que no alcanzan ni el 40% de lo que se considera normal en la provincia. Así lo desvela el informe sobre "Políticas públicas para combatir la pobreza en Castilla y León" elaborado a iniciativa propia por el CES y aprobado por unanimidad, en el que analiza las políticas públicas desarrolladas en la comunidad autónoma y en el que recoge una serie de recomendaciones para luchar contra la pobreza.
Ante esta situación, y de acuerdo con el documento de la Junta de Castilla y León "Directrices para la implementación de la Agenda 2030 en Castilla y León", "todas las políticas públicas a ejecutar en la comunidad deben asumir su responsabilidad en la solución de los problemas de desarrollo en su ámbito territorial", asegura el CES. "La coherencia de las políticas en la consecución del desarrollo sostenible es indispensable en la respuesta a los problemas globales y del ámbito territorial, alineándose así con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) en un marco de responsabilidad en la garantía de los derechos de ciudadanía".
El CES considera necesario desplegar "las medidas necesarias para luchar contra la pobreza con actuaciones más visibles, integradas y coordinadas, dotando de los instrumentos necesarios para su implantación, seguimiento y evaluación, que implique a todas las administraciones públicas en su conjunto". El organismo insiste en el "papel redistributivo que debe jugar el sector público, tanto en el aspecto de rentas como en el de provisión de los servicios públicos, para garantizar una red de protección social eficaz".
Las ayudas a la emancipación de los jóvenes, clave para lograr la inclusión social
El acceso a una vivienda digna y en adecuadas condiciones de habitabilidad “constituye un factor clave a tener en cuenta para lograr la inclusión social, la emancipación y el ejercicio de la ciudadanía”. Por eso, el CES recomienda consolidar e incrementar el fomento del alquiler con un mayor parque público de alquiler social, hasta alcanzar 3.000 viviendas, continuar con las subvenciones al alquiler y desarrollar nuevas medidas de ayuda para jóvenes en el medio rural.
También las medidas de rehabilitación y la regeneración urbana desarrolladas hasta ahora en Castilla y León “han sido fundamentales para lograr la habitabilidad en condiciones óptimas de muchas viviendas”. Por ello, el CES aconseja seguir desarrollando estas medidas ya que “contribuyen a la cohesión social y urbana de zonas, en muchos casos, degradadas y vulnerables”. Así, ve necesario seguir impulsando programas como “Rehabitare” para el acondicionamiento de edificios en el medio rural, para incorporarlos al parque público de alquiler social.
LOS DATOS
- Benavente. Según los datos que publica el CES en su informe Benavente es, de las ciudades analizadas, la que presenta unos mayores índices de pobreza. Según el documento, el 27% de los vecinos del municipio pasa necesidad económica y el 13,8% está en riesgo de pobreza severa.
- Zamora, mal parada. Zamora no queda en buena posición si se analizan las nueve capitales de provincia de la comunidad. Con los datos de pobreza que presenta, la capital solo tiene una situación mejor que las ciudades de Salamanca y Ávila. Las otras seis capitales de la región tienen unos datos mejores que los registrados en Zamora.
- Este-oeste. Llama la atención la posición menos favorecida, en términos de riesgo de pobreza, de las localidades situadas el oeste de la comunidad, frente a las localidades que sufren menos pobreza situadas en el centro (Valladolid) y noreste, que se benefician de una posición también más central en el mapa nacional.
