Las restricciones al tráfico motivadas por la declaración del estado de alarma han provocado una importante caída del consumo de combustible que en la provincia de Zamora oscila entre el 38% del gasóleo A y el 63% de la gasolina 95. Los datos ofrecidos por la Corporación de Reservas Estratégicas de Productos Petrolíferos (Cores) indican cómo el confinamiento ha supuesto un desplome absoluto de la venta de combustibles para vehículos y tan solo se ha librado el gasóleo B, utilizado para las labores agrícolas. En este particular, el crecimiento ha sido del 22%.

La tendencia sigue la línea de lo iniciado a partir del 14 de marzo, cuando España y Zamora entraron en un confinamiento que, en un primer momento, sólo permitía los desplazamientos de aquellos trabajadores esenciales y autorizados. A partir de la entrada del país en las fases establecidas en la desescalada, poco a poco se fueron abriendo las puertas para los desplazamientos dentro de los mismos municipio y más tarde, dentro de las provincias. Todo ello ha provocado la caída libre del combustible, ante la práctica imposibilidad de utilizar el vehículo.