Abundan los artistas consagrados, pero también hay jóvenes con prometedoras carreras por delante, los hay zamoranos y de fuera, incluso de otros países, son hombres y mujeres, la mayoría pintores, aunque se ha colado un escultor. Es la ecléctica exposición que ayer inauguró la sala Espacio 36, que dirige Ángel Almeida, y que ha vuelto con fuerza después del confinamiento ya que esta es la tercera muestra desde que se levantase el estado de alarma.

La exposición, inaugurada en la tarde de ayer y abierta hasta el 5 de agosto reúne 27 piezas de una docena de artistas que solo tienen un denominador común, su vinculación al verano que da título a la nuestra: "Art in the summer time". El cartel está compuesto por Ricardo Robles-Musso, Fernando Devesa, José Ángel Marcos, Ana Zaragozá, Isidoro Moreno, Carmen Varela, Javier Aoiz Orduna, Elena Molinari, Teresa Brutcher, Cinabrio Figueroa, Juan Carlos Matilla y Víctor. Hay varios zamoranos, como Matilla, Ana Zaragozá o el escultor José Ángel Marcos, que presenta dos piezas en una exposición dominada fundamentalmente por la pintura.

Y hay artistas de fuera, algunos muy vinculados a España, como la uruguaya Elena Molinari, la californiana Teresa Brutcher o la mexicana Cinabrio Figueroa. "Si, en cierto sentido podría decirse que es una exposición de carácter internacional", relata el galerista Ángel Almeida.

El hilo argumental de la muestra es el verano e incluso las tarjetas promocionales figuran con unas letras que "parece que están sudando" y a partir de ahí los artistas y las obras expuestas tienen poco que ver, es una muestra ecléctica. "Hay gran diversidad de técnicas y propuestas estéticas; hay figuración, hay paisaje, neoexpresionismo, hiperrrealismo...Se trata de que el expectador que se asome a la exposición se encuentra con diferentes puntos de vista".

Ángel Almeida destaca que la nómina de artistas está compuesta por figuras consagradas y "gente jóven, pero que tiene ya sus señas de identidad".

Una exposición colectiva de grandes maestros y otrra de Menchu Uroz han precedido a la muestra inaugurada ayer en Espacio 36, prueba de que el arte se sigue abriendo camino entre las dificultades derivadas de la pandemia del coronavirus. Almeida es optimista, y de hecho, ya tiene muy avanzada toda la programación de este año y el que viene. Y con respecto al mercado del arte en general, puede ser que este periodo de encierro y reflexión suponga un buen momento para poner en valor el disfrute de los valores que tanto aportan al ser humano.