La conflictividad mostrada por el asesino de la joven de 32 años Leticia Rosino en el centro de menores de Zambrana, donde cumplía la condena a ocho años de internamiento por el crimen, ha llevado al juez de Menores a decretar su ingreso en un penal de adultos, una vez alcanzada la mayoría de edad en marzo.

La Ley permite mantener hasta los 21 años en el centro especial de menores al autor del grave delito, de iniciales D.A.A., ocurrido el 3 de mayo de 2018 en Castrogonzalo, salvo que su conducta no se ajuste al objetivo de la inserción social; de corregir las carencias para su socialización que detectaron los técnicos y especialistas cuando le entrevistaron. El auto incluye un exhaustivo informe al respecto, donde se detalla que el joven no ha variado su comportamiento en estos dos años, ya que continúa sin acatar las normas y valores necesarios para vivir en sociedad, aunque sí parece ser consciente de la gravedad de los hechos que protagonizó, del crimen y la agresión sexual a Leticia.

Los resultados de la terapia que seguía en Zambrana "para corregir los desajustes conductuales y de estructura de la personalidad" tampoco han servido para que evolucione positivamente, lo que se cree que se debe a su poca capacidad de control y para gestionar emociones. Esto, junto a su actitud agresiva, conducen a apuntar al joven como una persona de "alto riesgo", circunstancias que aconsejan que se le derive a una cárcel de adultos, medida con la que el Ministerio Fiscal se ha mostrado partidario, de acuerdo con la información que recoge el auto del juez.

El análisis del equipo multidisciplinar de Zambrana, de Protección o Reforma de Menores y el Ministerio Fiscal han sido determinantes para que el magistrado decida trasladar al procesado a un centro penitenciario, no sin conceder a la fiscal de Menores, a los abogados de la familia y al del joven tres días para que presenten alegaciones si lo desean en el plazo de tres días que cumple este mismo viernes.

"Satisfacción y alegría"

El asesino de la joven tabaresa Leticia Rosino Andrés cumplirá, pues, los seis años reclusión que le restan de su condena un centro penitenciario. El abogado de la familia de Leticia, Miguel Ángel Martín Anero, se mostraba ayer "muy satisfecho y muy contento" por la decisión del magistrado de Menores, "es lo que siempre hemos pedido desde esta parte, hemos luchado por ello". Martín Anero expresaba "alegría por esta resolución judicial".

El Ministerio Fiscal no presentaría alegaciones contrarias a esta decisión, como tampoco el abogado de la familia. Sin embargo, el letrado de oficio que defiende al joven asesino se verá en la obligación de recurrir en cumplimiento de su deber de obtener los mayores beneficios para su cliente, en este caso, la permanencia en Zambrana durante tres años más.

La Audiencia

Lo más probable es que las alegaciones que pueda interponer el abogado de la defensa no sean admitidas por el juez de Menores, dada la contundencia de los informes técnicos que avalan su auto, por lo que el asunto podría recalar en la Audiencia Provincial, última instancia a la que el joven puede acudir para tratar de cumplir en Zambrana otros tres años antes de que se le traslade a la cárcel.

La resolución judicial no será firme hasta que la Audiencia estudie las observaciones contrarias de la defensa, lo que podría dilatar su internamiento en la cárcel hasta septiembre, dado que agosto es un mes inhábil desde el punto de vista judicial. Los ocho años de internamiento a los que fue condenado D.A.A. es la pena máxima que permite el Código Penal cuando el autor de un crimen es un menor de edad. El juez le sumó cinco años de alejamiento de Castrogonzalo, donde vive la pareja de la joven asesinada, y de Tábara, donde vive su familia.