La Fiscalía Provincial y el centro de internamiento de menores Zambrana elaboran sendos informes sobre la evolución del asesino de la joven tabaresa de 32 años Leticia Rosino Andrés, el 3 de mayo de 2018 en Castrogonzalo, para que el juez de Menores determine si conviene su traslado a un centro penitenciario para adultos donde cumplir los seis años de condena que le quedan.
Una vez que el joven, de iniciales D.A.A., ha alcanzada la mayoría de edad en marzo pasado, el Código Penal permite al magistrado ordenar bien su permanencia en Zambrana hasta los 21 años, bien su ingreso en una prisión para que termine de cumplir los ocho años de reclusión a que le impuso por los delitos de asesinato y violación que admitió haber cometido durante el juicio, celebrado en noviembre de 2018.
Los informes técnicos de Fiscalía y del equipo del centro de internamiento de menores recogerán los aspectos de la evolución de quien entró con 16 años el 6 de mayo de aquel año, primero como medida cautelar, donde permanece internado tras la condena firme, que incluye 5 años de libertad vigilada.
A esos informes se sumarán los que realicen tanto la acusación particular, representada por el abogado de la familia, Miguel Ángel Martín Anero, como el letrado de la defensa, Raúl Hirakawa Andía, quienes han rehusado efectuar declaraciones a este respecto.
No obstante, Martín Anero presentó un escrito para exigir al magistrado que ordene el ingreso en prisión del condenado de forma inmediata una vez que ha cumplido los 18 años. El letrado ya solicitó que se le impida instalarse o aproximarse a Castrogonzalo, donde reside el novio de la víctima, y a Tábara, donde vive la familia de la joven Leticia durante los cinco años de libertad vigilada, medida a la que se le someterá tras cumplir los ocho años de reclusión que le impuso el juez de Menores. Se treta de la pena máxima que permite la Ley del Menor, objeto de una gran controversia social y que originó la solicitud de un cambio legislativo para que se reforme la norma y este tipo de delincuentes permanezcan recluidos de por vida.
Un interno con varios expedientes abiertos en dos años de reclusión
Todo parece apuntar a que el joven que asesinó a Leticia Rosino Andrés el 3 de mayo de 2018 en Castrogonzalo terminará su condena a ocho años de prisión en un centro penitenciario para adultos, dado el carácter conflictivo que ha venido demostrando durante los dos años de reclusión en Zambrana, el centro especial para menores que delinquen, según fuentes consultadas por este diario. El joven, de iniciales D.A.A., se ha visto inmerso en peleas y protagonizado incidentes que han llevado al personal técnico a abrirle varios expedientes disciplinarios desde su internamiento el 6 de mayo de 2018.
Los forenses ya describieron en su informe psicológico la frialdad y la falta de empatía de D.A.A. al actuar. Destacaron su personalidad compatible con la de quienes "no tienen sentido de culpabilidad", ni dan muestras de arrepentimiento "de forma abierta y natural", como recogían los equipos multidisciplinares que le entrevistaron tras ser detenido. El adolescente, "calculador y frío", se mostraba "pasivo y desafiante", con altibajos anímicos, es "narcisista y egocéntrico", según los expertos que efectuaron el examen psicológico durante la instrucción del caso. Los médicos dijeron de él que tiene una forma de ser y estar en el mundo que no le permite sentir empatía con la víctima por lo ocurrido, llegan a hablar de un "vacío emocional de las respuestas", de "frialdad emocional y tendencia al egocentrismo".
