Ocho personas que viven en residencias de ancianos de la provincia de Zamora están aisladas con síntomas de COVID, cinco más que en la jornada precedente, donde solo había tres residentes en estas circunstancias. Son pequeños rebrotes de la enfermedad que todavía se resiste a desaparecer de los geriátricos.

Cuatro de estos residentes aislados corresponden al centro público de "Los Valles", en Benavente, que esta semana permanecía sin ninguno.

Lo que se ha reducido notablemente es la mortalidad, estabilizada en los últimos tres días en esos 123 residentes, 60 de ellos muertos con Covid confirmado y 63 con síntomas.