El maquinista titular del Alvia que cubría en la tarde del martes del trayecto entre Galicia y Madrid que descarriló a la altura de la base de La Hiniesta tras colisionar con un automóvil que había caído desde un puente a la vía, permanece estable en la UCI del hospital Virgen de la Vega de Salamanca, según las fuentes consultadas por este diario.

El maquinista, Francisco Picazo, es un zamorano de 55 años residente en La Coruña, que fue trasladado inicialmente al Complejo Asistencial de Zamora nada más producirse el siniestro aunque unas horas más tarde, a las nueve de la noche era evacuado hasta el hospital de Salamanca.

Al parecer sufre lesiones de importancia en tórax y vértebras como consecuencia del fuerte impacto que sufrió la locomotora que conducía y que acabó con la vida de su compañero de prácticas, Alexander P. S., de 32 años, hijo de un interventor de Renfe.

Despliegue en Urgencias

La verdad es que la noticia del accidente ferroviario movilizó de forma inmediata los resortes del Complejo Asistencial. La gerente, Montserrat Chimeno destacó que casi no había hecho falta ni llamar a la gente ya que enseguida aparecieron voluntarios a trabajar por si se necesitaba su ayuda ante lo que podía haber sido una auténtica avalancha de heridos.

Enseguida se tomaron medidas, evacuando a las personas que estaban esperando en Urgencias, que tuvieron que aguardar en la calle, con el fin de no interferir las labores de atención a los heridos en el accidente ferroviario.

Y poco a poco fueron llegando las ambulancias de Sacyl y una de Cruz Roja con los damnificados del accidente, a los que esperaba un nutrido ejército de sanitarios convenientemente protegidos como dicta el protocolo COVID.

No llegó al hospital el maquinista fallecido, ya que pese a los intentos de reanimación no se pudo hacer nada por salvar su vida.

Poco a poco se iban, no obstante, aclarando las cosas, como ponía de manifiesto la presencia policial, intensa inicialmente en Urgencias pero que se iba diluyendo a medida que el trabajo de los agentes era más necesario en otro lugar, la cercana estación de tren, con el fin de acomodar a los viajeros del tren siniestrado en el Alvia que esperaba en la estación y colocar a los que ocupaban este tren en los autobuses con destino Galicia.

Llegaron otros seis heridos a Urgencias en tres ambulancias, todos ellos con contusiones leves, en cervicales y otras partes del cuerpo y ataques de ansiedad. Se les procuró asistencia médica y psicológica y a las pocas horas todos tenían el alta.