Este miércoles darán comienzo las obras de ampliación del Camino de las Llamas de Zamora a la altura de la subestación eléctrica de Iberdrola. El proyecto incluye un ensanche de la calzada que permita el doble sentido de circulación de vehículos en el tramo colindante con la instalación eléctrica, ubicada en el paraje conocido como “Bodega del Torrao”, para facilitar el acceso y salida de vehículos desde el nuevo puente sobre el ferrocarril.

Se trata de un cuello de botella que impide el cruce de dos vehículos y obliga a un cambio brusco de carril, en un tramo cada vez más transitado desde que se construyó el puente elevado sobre la línea del AVE, que comunica la carretera de Villalpando y los barrios de Alviar y Siglo XXI con los hospitales y la zona Este de la ciudad.

El proyecto contempla la intervención en un tramo de unos cien metros lineales, consistente en el ensanche de la calzada por la margen izquierda en dirección salida hasta una anchura total de 7,33 metros, lo que permite la dotación de un carril en cada sentido de más de 3,5 metros cada uno; manteniendo un espacio de acera de casi dos metros junto a la estación de Iberdrola. El presupuesto de licitación de las obras ha sido de 27.000 euros y el plazo de ejecución previsto de un mes.

"En principio el tráfico rodado no se verá afectado por las obras, excepto el día que se proceda al extendido de las mezclas bituminosas y otros momentos puntuales, en los que el tránsito de vehículos se regulará por los propios operarios de la obra", explica el Ayuntamiento de Zamora.