Cada vez menos, con una población más envejecida y con pocos niños. Esta radiografía de brocha gorda sirve como resumen superficial de la evolución demográfica de la España Vaciada, y también de Zamora capital, que resistió durante un tiempo los envites de la despoblación, pero que ya acumula varios años en números negativos y con índices que muestran una tendencia clara de pérdida de habitantes.

El último indicador dado a conocer este martes por el Instituto Nacional de Estadística revela que más de una cuarta parte de los habitantes de la capital supera los 65 años. Concretamente, el 25,06%. Este informe, que se publica desde el 2015, deja patente que la cifra de zamoranos en edad de jubilación crece cada año, y es que hace menos de un lustro esa cantidad no alcanzaba el 23%.

Además, la tendencia ascendente del número de personas mayores coincide con el descenso de la cifra de niños que reside en Zamora capital. Actualmente, los menores de 14 representan un 11,74% de la población total de la ciudad. Es decir, los zamoranos que superan los 65 años duplican con creces a los que no alcanzan los 14, un dato que sigue lejos de las demoledoras realidades de algunas comarcas, pero que no deja de ser sintomático.

En todo caso, el grueso de los 61.406 habitantes de Zamora se sitúa entre los 14 y los 65 años, aunque el porcentaje que representa este amplio abanico de edades también ha cedido terreno en los últimos años al colectivo de personas mayores.

En cuanto al resto de los datos que aporta el llamado Urban Audit publicado por el Instituto Nacional de Estadística sobre los municipios de más de 20.000 habitantes, destaca el repunte de la proporción de extranjeros sobre la población total. La cifra sigue siendo baja en comparación con otros territorios, pero un 5,8% de los residentes en Zamora capital procede de otros países. En 2018, la cifra apenas alcanzaba el 5,58%.

Por otro lado, otro de los indicadores que llama la atención es el que detalla el número de hogares que existe en cada población y la distribución de sus habitantes. En Zamora, cada vez hay más personas que viven solas. De hecho, si en 2015 la cantidad de domicilios con un único individuo representaba el 30,42%, ahora esa cantidad ha aumentado hasta el 32,74%.

Así pues, casi un tercio de los hogares de la capital cuenta con un solo residente, una circunstancia que ha provocado que el tamaño medio de los domicilios de Zamora haya bajado de 2,38 a 2,28 personas desde el año 2015 hasta ahora.