La ciudad de Zamora cuenta las horas para sumarse a la fase 1 de la desescalada después de más de dos meses en confinamiento. Eso sí, las actividades a realizar no serán tantas ni tan libres como a priori se podría pensar. Los horarios de paseo y deporte seguirán vigentes, aunque se ampliará el abanico de razones por las que poder salir a la calle fuera de esas horquillas. Los bares podrán por fin abrir sus puertas siempre que sea en exteriores y algunas instalaciones deportivas también podrán hacer lo propio, aunque para deportes concretos y siempre con cita previa. Las bibliotecas recuperarán el servicio de préstamo y sala de lectura, así como los centros educativos para tareas administrativas. Todo eso deberá estar preparado a lo largo del fin de semana.

El Ayuntamiento de Zamora ha tomado la delantera a la hora de preparar las primeras medidas de cara a la esperada desescalada. El equipo de Gobierno permitirá a los hosteleros ampliar la superficie de sus terrazas siempre que el espacio en la calle lo permita y ajustándose a las normas establecidas por el Gobierno. Esto quiere decir, que como máximo podrán contar con un 50% de las mesas y sillas permitidas durante el año anterior, siempre y cuando se garantice el mantenimiento de las medidas de seguridad.

La noticia ha calado con cierto alivio entre el sector de la hostelería en Zamora, que no conseguía ver la luz al final del túnel. Por eso, no fueron pocos los propietarios que ayer mismo comenzaron a preparar sus locales tras escuchar las esperadas palabras del ministro Salvador Illa respecto al cambio de fase de la capital. Juan Ávila, dueño de un bar en el entorno de La Marina, fue uno de los que se puso el mono de trabajo para poder abrir el lunes, aunque sin mucha esperanza. "Poder abrir solo la terraza y además al 50% es perder dinero, pero es lo único que nos dejan y tenemos que empezar a salir como sea de este agujero", se quejaba en palabras a este diario.

El alcalde de la capital, Francisco Guarido, ha asegurado que su objetivo prioritario ahora que Zamora entra en fase 1 es resolver la crisis económica. "Nuestro cometido será intentar impulsar la recuperación económica y vigilar que se cumplan las normas que hay sobre la crisis sanitaria", ha señalado en declaraciones a Ical. "Esto pasa por potenciar la hostelería, el comercio y todos los servicios públicos", ha añadido. "Hay que seguir cumpliendo las normas, pero con un objetivo común; empezando a pasar la crisis sanitaria, hay que pensar en dulcificar la recuperación de la situación económica", ha concluido el regidor.

En el caso de los museos, los dependientes de la Junta de Castilla y León ya han confirmado que no abrirán sus puertas hasta el próximo viernes, a pesar de poder hacerlo ya desde el pasado lunes. Las bibliotecas, por su parte, sí se están preparando para recibir de nuevo usuarios, aunque tan solo para actividades de préstamo y devolución de obras, así como para la lectura en sala, información bibliográfica y bibliotecaria, siempre con una reducción del aforo del 30%. Entre las prohibiciones, según han apuntado a este diario, aparece la del uso de ordenadores y material informático, dado que resulta imposible garantizar una desinfección detrás de cada usuario.

La noticia más esperada de esta fase 1 será, sin embargo, la del reencuentro con familiares y amigos, aunque también con restricciones. Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado vigilarán que se cumpla en Zamora la normativa de que los grupos reunidos no excedan el número de diez personas. Encuentros que podrán realizarse tanto en la vía pública como en los domicilios particulares.