La crisis del coronavirus ha llevado sus efectos colaterales hasta el desierto. En los campamentos de refugiados de Tinduf, en Argelia, no lamentan por el momento ningún positivo en Covid-19, pero sí la cancelación del programa Vacaciones en Paz, que esperaba traer a la provincia de Zamora a más de cuarenta menores durante el próximo verano para huir de las temperaturas extremas de este punto del planeta. La Delegación Saharaui en España ha comunicado a las asociaciones la suspensión de esta iniciativa solidaria debido a las "circunstancias excepcionales que atraviesa el mundo". Esa delegación ha recordado que actualmente la solidaridad y la cooperación se hacen más necesarias que nunca y la decisión se ha adoptado "en beneficio de toda la humanidad".
La provincia de Zamora es todo un referente dentro del programa Vacaciones en Paz y habitualmente es el territorio que más menores saharauis acoge verano tras verano en el conjunto de Castilla y León.
El programa, que se desarrolla desde hace décadas, permite que los niños de los campamentos de refugiados en los que se asienta parte de la población saharaui desde hace 44 años pasen la época estival en España y eviten así las temperaturas de más de 50 grados que se rebasan entonces en el desierto y brinda la oportunidad a los niños de convivir con familias de acogida y suplir las carencias nutricionales que tienen en el lugar donde viven habitualmente. Este año no será posible y con esta decisión se pretende evitar un posible brote del nuevo coronavirus, ya que los precarios medios sanitarios de los campamentos agravarían las consecuencias de la enfermedad. Las familias zamoranas y "sus" niños deberán esperar un curso más para volver a verse.
