El coronavirus también ha influido en la forma de trabajar de los voluntarios del Banco de Alimentos, que estas semanas están redoblando sus esfuerzos, tanto en recoger productos de diferentes establecimientos e incluso ciudades como en repartir estos cargamentos. De esta manera, ya superan las diez toneladas de alimentos repartidos por toda la provincia entre las familias más necesitadas desde que comenzó la cuarentena, según calcula el presidente del Banco de Alimentos de Zamora, Andrés Rincón.

"Estamos en horario de mañana en el almacén todos los voluntarios que podemos, porque hemos decidido que se queden en sus casas aquellos mayores de 67 años, para que no haya riesgos", argumenta el presidente. El resto, se reparte entre organizar los cargamentos hasta coordinar las salidas para recoger producto. "Tenemos contacto con los Bancos de Alimentos de ciudades cercanas como Salamanca o Valladolid y nos acercamos allí cuando les sobra o son productos frescos de corta caducidad y no pueden repartirlos entre sus usuarios antes de que se estropeen", explica Rincón.

La ONG está en contacto permanente también con la Subdelegación del Gobierno para coordinarse ya que, por ejemplo, recientemente han realizado un viaje a Benavente para repartir mil kilos de alimento de manera urgente, solicitados desde el ayuntamiento de la localidad, al igual que más viajes a pueblos como Morales de Toro. "Estos pedidos vienen por oleadas y hay que estar preparados", reconoce el presidente de la ONG en Zamora, quien apunta que "cuanto más tiempo pase con esta crisis, las cosas se irán complicando un poco más".

Cruz Roja también se ha acercado al almacén del Banco de Alimentos de Zamora, para repartir dos toneladas de alimentos entre los usuarios que tiene por toda la provincia.

Hasta ahora, Andrés Rincón agradece enormemente la generosidad de diferentes supermercados, empresas y fábricas de alimentación zamoranas, que han donado al Banco desde leche hasta congelados, frutas y verduras frescas o queso y carne. "Incluso uno de estos establecimientos nos ha donado dos cámaras frigoríficas para que los alimentos aguanten más tiempo para poder hacer el reparto", detalla.

La solidaridad no solo viene de las grandes empresas, sino que también se ha volcado mucha gente anónima. "El otro día una señora nos donó dos mil euros para que compráramos leche", pone como ejemplo. Además, existen dos números de cuenta del Banco de Alimentos de Zamora en Caja Rural y La Caixa para que la gente pueda aportar su granito de arena.

Mientras tanto, los voluntarios del Banco de Alimentos de Zamora atienden también a todos los que, de manera excepcional, se acercan estos días a su almacén para pedir ayuda para sobrellevar mejor esta cuarentena.