El sindicato CSIF señala que tanto las clases como las evaluaciones de este curso 2019-2020 tan atípico deben finalizar en el mes de junio, como es habitual, a pesar de las circunstancias especiales que lo rodean por culpa de la crisis sanitaria. Esa petición es la que también se respalda en la Comisión Permanente del Consejo Escolar de Estado, a pesar de que algunas voces se habían alzado para señalar la necesidad de alargar más allá de junio las clases lectivas.

Para defender lo contrario, el sindicato independiente quiere subrayar que tanto los docentes como los alumnos e incluso las familias -en definitiva, toda la comunidad educativa- "están haciendo un gran esfuerzo por continuar el curso mediante la formación online durante el estado de alarma" para añadir que los profesores "han asumido la nueva situación con una gran profesionalidad desde sus domicilios", felicitan.

Según subraya CSIF, ni docentes ni estudiantes "están de vacaciones", como bien ha dejado claro también el Consejo Escolar, que ha presentado un borrador de propuestas. "La carga psicológica que están soportando en estas circunstancias exige también un tiempo normal de descanso y que el curso no se extienda" más allá del mes de junio, argumentan.

Aunque el sindicato se muestra de acuerdo con esta medida puesta sobre la mesa en el borrador de propuestas del Consejo Escolar, disiente sobre su postura respecto a la Evaluación de Bachillerato para el Acceso a la Universidad (EBAU). "Las aportaciones del Consejo nos parecen escasas y defendemos que haya una única prueba y que además se celebre en la misma fecha", sugiere el sindicato.

"Echamos en falta soluciones en el caso de las enseñanzas de régimen especial, como el Conservatorio o la Escuela de Idiomas, por lo que planteamos más aportaciones para enriquecer el texto final del Consejo, que se abordará el próximo martes", anuncian.