A pesar de la imposibilidad de celebrar velatorios o acudir en familia al entierro, las psicólogas aseguran que hacer rituales de despedida en casa ayudan a "gestionar mejor el duelo y sentir que el adiós no se está dejando para más adelante".

Sara Castro destaca que la importancia de celebrar rituales de despedida reside en que "son formas de expresar lo que tenemos interiormente a nivel espiritual y emocional". Es importante hablar con el resto de familiares para decidir cómo decir adiós desde casa, "porque cada uno lo expresará de una manera".

Las posibilidades son muy variadas: escribir una carta al fallecido o reservar un rincón de la casa para recordarle pueden ser de utilidad. Para compartir el dolor, "puede hacerse una página en alguna red social donde cada persona deje un mensaje de condolencia, como se haría en circunstancias normales y, una vez retomemos la vida normal, leerlas en alto en el funeral".