Los juzgados de Zamora funcionan a medio gas, pero aseguran la protección de los derechos básicos ciudadanos durante la época de restricción de actividad provocada por el coronavirus con el fin de asegurar, por ejemplo, la asistencia a las personas detenidas, los casos de violencia de género o la atención a los menores.

El presidente de la Audiencia Provincial de Zamora , Jesús Pérez Serna, explica que se realiza cualquier actuación judicial que de no practicarse pudiera causar un perjuicio irreparable, los internamientos involuntarios urgentes (por ejemplos de personas con una crisis psiquiátrica), la adopción de medidas cautelares y otras actuaciones de protección de menores (prestación de alimentos o régimen de visitas en casos de padres divorciados, por ejemplo), los casos de violencia sobre la mujer y las órdenes de protección.

El Registro Civil presta servicio, sobre todo por la expedición de las licencias de enterramiento y otros trámites, como la celebración de matrimonios en peligro de muerte o certificados de nacimiento con plazo perentorio.

Los juzgados llevan a cabo las actuaciones con detenido y otras que resultan inaplazables, como la adopción de medidas cautelares, levantamientos de cadáver, entradas y registro en domicilios, "como ocurrió en otro día con una señora que no respondía a las llamadas", relata Pérez Serna. Se debe llevar a cabo, "cualquier actuación con preso o detenido", incluido el juicio que está previsto el miércoles de una persona que está en prisión. Y en lo Social, los juicios laborales y lo relacionado con los ERTEs (expedientes de regulación temporal de empleo).

Hay funcionarios con presencia física en el juzgado de guardia, el de violencia de género, el decanato, Penal, Menores, Audiencia y Registro Civil. Uno de los aspectos más delicados es la asistencia a detenidos que, como explica Pérez Serna y el decano del Colegio de Abogados, Norberto Martín Anero se trata de solucionar con una primera asistencia telefónica "y se recomienda al detenido que declare ante el juez", lo que se puede hacer de forma telemática en la capital. Los abogados, explica Martín Anero, están sufriendo los efectos de una caída de actividad casi total y el Colegio condonará las cuotas de medio trimestre, además de hacer un ERTE.