La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha solicitado a la Consejería de Sanidad que habilite alojamiento a los profesionales sanitarios que prefieran no ir a sus casas después del trabajo, para evitar así a sus familias el riesgo de contagio del COVID-19 y, por tanto, su propagación. CSIF denuncia que los sanitarios carecen de los medios de protección adecuados y suficientes, y que su riesgo de contagio es alto, como lo demuestra el dato del número de profesionales infectados, que se ha disparado hasta los 5.500 en Castilla y León.

"A la precariedad en el equ ipamiento necesario para que nuestros profesionales puedan realizar con el mínimo peligro posible su trabajo, se une la preocupación de los mismos por su salud y la de sus familias, por ser una fuente de contagio para ellas", indica el sindicato.