Contra las noticias de personas insolidarias que incumplen las medidas de confinamiento, el altruismo de aquellos que ponen sus recursos y su esfuerzo a disposición de la lucha contra el coronavirus. En los últimos días han aparecido varios ejemplos de individuos, empresas y colectivos que han utilizado sus conocimientos para confeccionar mascarillas y otros equipamientos, o donar geles para que la ciudadanía pueda estar más protegida, especialmente los más vulnerables.

Uno de estos casos es el del diseñador zamorano Miguel de la Iglesia. "Tengo muchos clientes que son médicos, enfermeros o farmacéuticos. También, durante estos días, oyes lo que dicen en la tele y piensas qué puedes aportar tú", explica el profesional, que nunca pensó que acabaría confeccionando este tipo de "prendas", pero que tiene muy clara una cosa: "En esto estamos todos".

Por eso, desde hace unos días , De la Iglesia está trabajando en su taller, a puerta cerrada, fabricando mascarillas con el material del que dispone: "Me supone un parón en mis tareas habituales, pero esto es prioritario", asevera el diseñador, que se dedica mañana y tarde a su nueva tarea: "Cuando esto empezó, pregunté en la farmacia por mascarillas y ya no tenían; ahora soy yo quien se las lleva a ellos", apunta.

En principio, a la espera de entregar todo este remanente, Miguel de la Iglesia espera poder donar 150 o 200 mascarillas: "Todo lo que hagamos es poco", concluye.

Por su parte, el responsable de Miguel Lozano Cristalería carece de materiales para confeccionar mascarillas, pero en cambio tiene los recursos para completar las mascaras anti salpicaduras con las necesarias pantallas de protección.

Así las cosas, y después de oír que otras personas también se estaban poniendo manos a la obra, el responsable de esta empresa zamorana decidió entregar, de forma totalmente gratuita, 600 placas de acetato que complementarán a las máscaras que se están realizando con impresoras 3D. "Lo hago porque creo que es importante ayudar", asegura. Otro gesto altruista en medio de una crisis que también muestra la mejor cara de la gente.