Largas colas en los supermercados, carros llenos hasta la bandera y personas con más bolsas de las que pudieran cargar a pie de calle. Esa es la imagen del coronavirus en Zamora. Una fotografía que se reproduce desde que el pasado lunes la Comunidad de Madrid tomara las primeras medidas severas para afrontar esta crisis sanitaria. En la capital, a pesar del bullicio que ha existido a lo largo de la semana, no ha sido hasta este pasado viernes cuando las cosas realmente se han puesto serias en las grandes superficies y también en las pequeñas tiendas. Ayer mismo, la locura se apoderaba del Mercado de Abastos desde primera hora de la mañana. Una estampa que los comerciantes locales quieren erradicar. El abastecimiento alimentario, aseguran, está garantizado. Así que llaman a realizar compras pequeñas y responsables.

El presidente de la Asociación Zamorana de Empresarios del Comercio, Ruperto Prieto, ha sido la voz de un gremio que quiere que las cosas se tranquilicen cuanto antes. Frente a los últimos acontecimientos vividos en las superficies comerciales, desde Azeco han querido "hacer una llamada a la tranquilidad" tras asegurar que "el suministro de todos los productos de primera necesidad está garantizado" mientras dure la crisis sanitaria. En declaraciones a este diario, Prieto se ha mostrado comprensivo con la ciudadanía, pero también le ha pedido calma. "Rogamos que no se genere un nerviosismo que pueda llevar a registrar aglomeraciones en los supermercados, porque eso solo puede suponer un grave peligro para la salud de todos", ha manifestado.

La locura desatada con las compras masivas de las últimas jornadas puede resultar contraproducente, recuerdan los comerciantes, en productos como frutas, verduras u otros frescos. "Recordamos que no es necesario hacer acopio de mercancías y que los comercios alimentarios de proximidad serán suficientes para proporcionar a los zamoranos todo lo necesario, siempre cumpliendo las medidas higiénico sanitarias", ha indicado Ruperto Prieto. Un extremo, este último, que es imposible de garantizar cuando esa mercancía se conserva y almacena en los hogares.

La cadena alimentaria funciona y así debe continuar durante la crisis del coronavirus. Los comerciantes están seguros de ello, pero también reclaman la colaboración de la ciudadanía. "Es momento de ser solidarios entre los zamoranos, porque solo haciendo un uso racional de nuestros comercios será posible que puedan seguir ofreciéndonos sus servicios durante esta crisis", ha añadido el presidente de Azeco, quien también ha pedido a todas las instituciones "que vayan dando forma" a un paquete de medidas "para afrontar los problemas económicos a los que las pequeñas empresas se enfrentarán después de esta crisis".

En la misma línea que Ruperto Pérez se ha pronunciado el concejal de Comercio, Christoph Strieder, quien tiene entre sus competencias la gestión del Mercado de Abastos. Un recinto que, en las primeras horas de la jornada de ayer, vivía una auténtica concentración de personas en busca de alimentos frescos para llevar a sus hogares. Son precisamente esas aglomeraciones de gente lo que las autoridades contraindican en esta situación de emergencia sanitaria, dado que pueden ser un caldo de cultivo para la propagación del virus. Por eso, desde el Ayuntamiento de Zamora también han querido tomar medidas en lo que a la administración local compete, que es realmente poco. "Al igual que en otros recintos cerrados como pabellones o teatros, hemos decidido limitar el acceso al Mercado de Abastos a un tercio de su capacidad", ha comentado el edil. Además, se exige cumplir con las distancias de seguridad para evitar peligros sobrevenidos de la acumulación de personas.

La consigna es clara: hay productos para todos. Los habrá durante las próximas semanas y nadie se va a quedar desabastecido. Por eso, la calma será la mejor aliada en los días venideros.