Seis minutos más es lo que tarda en llegar la ambulancia a un pueblo respecto a Zamora capital. 360 segundos que pueden resultar vitales en circunstancias donde el tiempo juega en contra del paciente, como un infarto o un ictus. Consciente de la desventaja que supone vivir en el medio rural de cara a las urgencias médicas, la Consejería de Sanidad está trabajando en un plan para reducir al máximo estos tiempos y que los habitantes de los pequeños municipios partan con igualdad de condiciones para salvar sus vidas. Lo ha llamado Plan Estratégico de Sistema Integral de Atención Urgente e incluye una nueva reordenación de la atención continuada en Atención Primaria.

La medición del tiempo de respuesta de los equipos de emergencias sanitarias ofrece datos esclarecedores. Los habitantes de Zamora, Benavente y Toro, grandes núcleos urbanos de la provincia, reciben asistencia en una media de 18 minutos y 12 segundos. Unas cifras muy buenas en comparación con el medio rural, donde el tiempo de respuesta se eleva hasta los 24 minutos y 48 segundos. Y todo esto, siempre, de media. Es decir, que existen ocasiones en que se llega antes, pero también hay urgencias que tardan en atenderse hasta treinta minutos. Un mundo para determinadas patologías cuyo éxito depende de la rapidez de la respuesta.

Los parámetros de la Unión Europea marcan que el tiempo máximo que puede transcurrir entre la comunicación de la urgencia y la atención directa del paciente por parte del personal sanitario es de treinta minutos. En esa horquilla, los números juegan a favor de Zamora en su conjunto, pero no ocurre lo mismo si la comparación se realiza en el ámbito de Castilla y León. Según los datos ofrecidos por Sacyl. Nuevamente, la media se sitúa en contra de los habitantes del medio rural.

La dispersión poblacional y la extensión geográfica son las razones esgrimidas por la Consejería para explicar tales guarismos. Por ello, el nuevo Plan Estratégico buscará soluciones concretas en materia de urgencias, emergencias y urgencias hospitalarias -en la línea del Plan Piloto de Aliste- para definir dónde deberán estar ubicados los recursos móviles para una mayor eficacia a la hora de prestar el servicio encomendado.