La Consejería de Educación suprimirá el próximo curso 2020-2021 un total de 73 puestos de maestros por el cierre de 15 unidades en Castilla y León, tres de ellos en la provincia de Zamora, situación motivada principalmente por la falta de alumnos sobre todo en el medio rural. Con todo, la situación se ha moderado tras la negociación con los sindicatos. Con el borrador de Educación, las provincias más afectadas por los recortes y ajustes de las plantillas docentes eran León (saldo negativo de 16), Salamanca (15) y Ávila (13), seguidas de Zamora (7), Segovia (5) y Palencia y Valladolid (2, en cada caso). Soria se mantenía igual, al compensar la pérdida de cuatro maestros con la creación de otros tantos en Secundaria. Burgos era el único territorio con un balance positivo, al contar con dos puestos docentes más.

La negociación de la Consejería de Educación con los sindicatos de cada provincia -a la que solo acudieron el Sindicato de Trabajadores de la Enseñanza de Castilla y León (Stecyl) y Anpe- ha permitido reducir la pérdida de plantilla, hasta el punto de que el saldo negativo (58) se ha convertido en positivo (12) al existir más puestos creados que los suprimidos. Valladolid, con 21 puestos más, y Burgos, con 10 más, serán las provincias que saldrán mejor paradas el próximo curso, seguida de Segovia (4) y Palencia (2) mientras que Soria compensa las pérdidas y las creaciones. Por el contrario, León será la más perjudicada al perder 16 puestos, por la desaparición de 22 maestros. También habrá saldos negativos en Ávila (5), Zamora (3) y Salamanca (uno).

Plante sindical

La negociación de la propuesta de la Consejería estuvo marcada este año por el plante de tres de las cinco organizaciones sindicales presentes en la Mesa Sectorial como CSIF, UGT y Comisiones Obreras. Acusaron a la Junta de acudir a las reuniones con "criterios impuestos" y sin haber cumplido los compromisos firmados con los empleados públicos como la recuperación de la jornada de 35 horas. Además, acusaron a la administración de ocultar información con el objetivo de no aumentar las plantillas y apostar por "criterios economicistas", que están asentados en los "recortes" y no tienen en cuenta las necesidades pedagógicas ni la "desigual" distribución de la población en la provincia.

La portavoz de Stecyl, Christina Fulconis, reiteró a Ical que la negociación de las plantillas no son puestos de trabajo nuevos sino estables, que van a salir en los concursos de traslados del personal. "Es una garantía de continuidad de las plantillas para que los centros sepan los docentes con los que van a contar, lo que permite elaborar proyectos a medio y largo plazo que, a la postre, redundan en la mejora de la educación", expuso.

Fulconis reconoció que, por regla general, cada año los sindicatos consiguen "arañar" algunos puestos a la administración, tal y como ocurrió en la última negociación. Precisó que el aumento de docentes en Enseñanzas Medias es fruto de la pirámide poblacional, ya que los alumnos llegan a Secundaria y FP y obliga a consolidar 85 puestos. Frente a eso, se agudiza la pérdida de efectivos en Infantil y Primaria.