El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León ha anulado tres multas de 3.000 euros impuestas a otros tantos hombres por un delito de tráfico de drogas tras aceptar un recurso para tal fin en el que se razonaba que "nunca se pudo determinar el valor de las sustancias dada su distinta pureza". El fallo, que ha dado ha conocer el TSJ, enmienda así la sentencia dictada por la Audiencia Provincial de Zamora en la que se imponía a los acusados tres años de prisión y 3.000 euros de multa a cada uno de ellos tras haber sido intervenidos con diferentes cantidades de estupefacientes en su poder.
Tal y como se probó durante la investigación, uno de los condenados, al que apodaban "el químico", tenía instalado en Moraleja del Vino un laboratorio casero para la fabricación de sustancias estupefacientes.
