-Apis Durii ha sido la asociación encargada de organizar la Feria Apícola Internacional de Zamora, Meliza. Un trabajo de muchos meses que ha dado sus frutos a lo largo del pasado fin de semana, tal y como explica Daniel Ganado, uno de los representantes de la organización de este evento. Superada esta segunda edición, el objetivo no es otro que el de empezar a trabajar para que el próximo año Meliza se consolide como la feria internacional del norte de España por excelencia.

-¿Está Meliza ya consolidada como una de las citas de referencia en el calendario de ferias de Zamora?

Lo más importante que hemos conseguido este año ha sido dar un salto cuantitativo respecto al año pasado. Prácticamente, hemos doblado el número de expositores y por eso estamos contentos. También hemos conseguido que lleguen productores desde más lugares y una de las principales mejoras ha sido la oferta de suelo libre a la que se han sumado empresas de Portugal, principalmente fabricantes, que nos ha dado otro punto más de calidad. Poco a poco, Meliza se va haciendo un nombre.

-El año pasado Apis Durii fue colaborador y este año ha sido organizador. ¿Cómo ha sido el reto?

Creo que hemos hecho un buen trabajo sacando esta feria adelante. En la primera edición echamos una mano poniendo nuestro conocimiento al servicio de la feria y este año lo que hemos hecho a sido encargarnos de absolutamente todo. Hemos visitado otras ferias y hemos tratado de exportar aquello que nos ha gustado. A todo ello hay que sumar el recinto, que es muy adecuado para este tipo de eventos. Nos interesa cuidar a los clientes, pero también a los expositores, y por eso hay que ponerles muchas facilidades. Son ellos los que vienen hasta aquí a comprar material y es interesante que se encuentren cómodos.

-Una de las premisas de esta edición ha sido la de dar importancia al papel de la mujer apicultora. ¿Se ha superado esa prueba?

-La apicultura tiene un filón importante para que una mujer pueda asentarse en un pueblo y eso nos interesa a todos. Si la gente joven se queda a vivir en los pueblos, eso significa que no se cierran los colegios, ni los centros de salud, ni las panaderías, ni las tiendas. Es vida. Creemos que la apicultura es una buena forma de conciliar vida laboral y familiar y en eso las mujeres son muy importantes. Por eso, además, hemos querido impulsar dentro de la feria el Primer Encuentro Nacional de Apicultoras.

-¿En qué posición queda Meliza para su próxima edición?

-El objetivo es consolidarnos como una feria internacional en el norte de España. Queremos ser un referente y, en cierto modo, creo que eso ya se percibe por parte de los expositores. Estamos en el buen camino. Siempre podremos cometer algún fallo y tendremos que limar asperezas, pero si seguimos así, en el futuro esto va a ser algo muy bonito.