"Si no hay mujeres, no hay mundo rural". Con esta frase tan contundente, pero a la vez cargada de significado, quiso comenzar su exposición Teresa López, presidenta de la Federación de Asociaciones de Mujeres Rurales (Fademur) y una de las participantes en la mesa de trabajo que llevaba por título "El futuro de la España despoblada y sus protagonistas". Bajo la coordinación de Francisco Ramos, consejero del Consultivo, estuvieron presentes junto a López el vicerrector de Profesorado de la Universidad de Salamanca, José María Díaz, y la representante de Jóvenes de Castilla y León en Madrid, María José Pérez.

Fue precisamente Teresa López la primera en coger la batuta de la conversación para exponer la realidad de la mujer en el mundo rural. Una situación que, según su relato, se ha compuesto históricamente de "legislar para las mujeres sin contar con las mujeres". Para la presidenta de Fademur, resulta imprescindible que la mujer tenga entidad propia y máxime cuando se trata de territorios despoblados. Por eso, la aspiración de la organización que dirige no es otra que la de "ser la voz rural cuando se hable de políticas de género y ser la voz de género cuando se hable de políticas rurales".

La agricultura, con el concepto de agricultura familiar a la cabeza, es una de las maneras que expuso la presidenta de Fademur para que la España Vaciada salga del pozo. "Es una cuestión que identifica a España, pero también a la Unión Europea. Estamos viendo a los agricultores en lucha porque están al límite y debemos preguntarnos qué podemos hacer para cambiar esa situación y qué papel juega la mujer en todo el conflicto. De ahí, podremos extraer la solución", expuso.

El sector primario fue, evidentemente, uno de los grandes protagonistas del Congreso "Razones para quedarnos" y el vicerrector de Profesorado de la USAL, José María Díaz, fue otro de los ponentes en defenderlo. Aunque desde una perspectiva más centrada en el progreso. "El gran reto para el siglo XXI es modernizar la producción de alimentos y en España hemos renunciado a eso", denunció. "Otros países nos están tomando la delantera en aportar ese valor añadido mientras que nosotros estamos en cuestiones como la agricultura ecológica, que es una alternativa, pero no es la única", señaló.

María José Pérez, representante de Jóvenes de Castilla y León en Madrid, fue la tercera de las ponentes y quien aportó un discurso más ácido frente a las instituciones. Unas administraciones públicas, dijo, instaladas en la "desidia" y sin soluciones para las nuevas generaciones. "Nos dicen que no es la España Vaciada, sino la España de las oportunidades, pero la llamaremos así cuando realmente existan oportunidades", indicó.

En lo que se refiere a la segunda mesa, dedicada a las "estrategias contra la despoblación", el director de Minsait, Miguel Ángel González, la presidenta de la FRMP, Ángeles Armisén, el exdirector del Comisionado del Gobierno frente al Reto Demográfico, Ignacio Molina de la Torre, el presidente de Segittur, Enrique Martínez, y la coordinadora de proyectos y programas europeos de la Diputación de Zamora, Ana Sánchez, expusieron sus argumentos para trabajar contra esta problemática, en un espacio moderado por el director de Asuntos Públicos de Atrevia, Manuel Mostaza.

En ese sentido, González habló sobre transformación digital y abogó por "democratizar" el proceso, "eliminar barreras" y lograr que los productos del mundo rural puedan competir en un mundo global. El responsable de Minsait recordó que "hay nuevas tareas en la cadena de valor", y explicó que hay que asumir que "se debe elegir dónde disparar" para competir en ese contexto.

Por su parte, Armisén también mencionó la digitalización como "una oportunidad que el mundo rural nunca habría soñado", y apeló a hablar en positivo de los valores de los pueblos: "Hay que huir del tópico de que el éxito está solamente en lo urbano", advirtió la presidenta de la FRMP.

Ante esta realidad, Ignacio Molina de la Torre resaltó que los territorios despoblados están "ante un momento clave". Veníamos predicando en el desierto y ahora estamos "ante una ventana de oportunidad", reflexionó el experto en la materia, que dejó patente que "esta es una cuestión de país" y que insistió en que "las personas tienen los mismos derechos vivan donde vivan".

Además, como problema que no solo afecta a Zamora, sino que se da "a nivel mundial", Enrique Martínez apostó por afrontar el reto "sin papanatismos", llamando "a las cosas por su nombre" y teniendo claro que este es un conflicto "de liderazgo, no de gobernanza". El responsable de Segittur incidió en que "esto es de valientes", por lo que pidió "un paso al frente" y una huida de lo que llamó "lenguaje californiano".

El cierre llegó de la mano de Ana Sánchez, que dio los detalles del proyecto que está tratando de impulsar la Diputación Provincial sobre la Silver Economy. Además, la responsable del proyecto pidió que los criterios de los fondos europeos tengan en cuenta realidades como la de Zamora.

Más tarde, los componentes de la tercera mesa abogaron por recuperar los valores que emanan del mundo rural, resaltar los puntos fuertes de los pueblos, y subrayar que hay gente y cultura "en ese punto de España que hay entre Madrid y el mar". El espacio, que se desarrolló bajo el nombre "Comunicar en positivo" contó con una serie de ponentes (Sergio Martín, Agustina Sangüesa, Luis Miguel de Dios, Emilio Gancedo y Marisol López) que abogaron entre otras cuestiones por "acabar con el mensaje de que marcharse del pueblo es símbolo de éxito y que quedarse es de fracasados. Este pensamiento ha hecho mucho daño y todavía lo pagamos", aseguraron los ponentes.

Marisol López, directora de LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA, abogó por la unidad de los zamoranos y de los habitantes de la llamada España Vaciada. "Es importante tener una visión global. Si nos empeñamos en hablar de los problemas de cada uno no avanzaremos. Debemos, todos, defender nuestras fortalezas". Pidió López un "cambio de mentalidad" en los propios zamoranos. "No mandemos a nuestros hijos a estudiar fuera titulaciones que se imparten en Zamora". Además, defendió el papel de los medios de comunicación a la hora de "devolver la dignidad al campo".

Valores

Emilio Gancedo, autor del libro "Palabras mayores", subrayó que "es interesante recuperar los valores que subyacen en el mundo rural. Valores como la humanidad, compartir, no tener prisa o ayudarse. Algo que en las ciudades hemos perdido". Por su parte, Luis Miguel de Dios abogó en su intervención por "recuperar el pueblo que llevamos dentro, apostar por él y no resignarnos a que muera. El pueblo", continuó el periodista, "es una forma de entender la existencia, un lenguaje". En esta línea, apostó por "el respeto al mundo rural. Los que allí viven no son garrulos o paletos, son ciudadanos tan de primera división como el resto".

Sergio Martín y Agustina Sangüesa abogaron por "los buenos liderazgos" para revertir la situación de despoblación y por "hacer visible la situación de muchos núcleo rurales" respectivamente. Por su parte el moderador, David Redoli, puso sobre la mesa "el absurdo" de que "se esté generando una España Vaciada mientras otra, la de las grandes ciudades, está saturada. La política contra la despoblación debe ser una política de Estado, este es un problema de todos, no de las provincias afectadas. También de las grandes ciudades, porque España la configuramos todos", zanjó.