La Dirección General de Tráfico ejecutará durante la presente semana una campaña especial de control del transporte escolar en la capital y en la provincia. Durante los cinco días de duración de la misma, los agentes intensificarán las inspecciones, comprobando que las autorizaciones y documentos que deben tener dichos vehículos sean los correctos para la prestación del servicio. Asimismo, los agentes verificarán que las condiciones técnicas y los elementos de seguridad del vehículo son los que exige la normativa, así como los requisitos especiales que debe cumplir el propio conductor, como son el permiso de conducción o los tiempos de conducción y descanso.

La movilidad segura de los menores es una de las prioridades del organismo ya que cada día más de 600.000 alumnos utilizan el autobús escolar para acudir al colegio y regresar a casa, según el Observatorio del Transporte de Viajeros por Carreteras, del Ministerio de Fomento. Además, con este tipo de campañas se quiere recordar a los padres el derecho a exigir a los centros educativos o a las asociaciones de padres y madres que los autobuses que se encarguen del transporte escolar cumplan todos los requisitos normativos para realizar este tipo de transporte

La velocidad inadecuada y las distracciones son las principales causas de los accidentes en los que están implicados este tipo de vehículos, por lo que se controlará especialmente que se circula a la velocidad permitida y que no se hace uso del teléfono móvil u otros aparatos que supongan distracción. También se incrementarán los controles de alcohol y otras drogas entre los conductores.