El cruce de las calles Regimiento de Toledo con Santa Teresa y los tramos inmediatamente anteriores permanecían ayer tarde cortados al tráfico de vehículos y peatones ante la caída de pizarras y la estructura de madera sobre la que se apoyaban poco después de las once de la mañana de ayer. Los bomberos señalizaron la zona con cintas para evitar el tránsito debido a la posibilidad de que cayeran nuevos elementos potencialmente peligrosos desde el tejado.

Entre las 10 de la mañana y la una de la tarde se producían rachas de viento de entre 60 y 68 kilómetros hora en Zamora, que ocasionaron este y más problemas. Por ejemplo, los desprendimientos que ocasionaba el aire en otro tejado de pizarra de una casa junto al hospital Virgen de la Concha.

Entretanto, en la calle Hernán Cortés de la capital fue un ciprés el que no pudo con la embestida del viento y caía a la calzada. Los operarios municipales se encargaron de retirar el árbol y trocearlo para evitar males mayores.

Para hoy se espera que el viento se calme un poco y sople con menos intensidad, aunque no desaparecerá del todo.