Después de casi diez siglos de existencia, la iglesia de Santiago el Viejo, o Santiago de los Caballeros, como también es conocido el emblemático templo de Olivares, necesita pequeños arreglos para seguir exhibiendo la belleza que atrae a los turistas y que sigue maravillando también a los zamoranos. Sensibles ante esta realidad, los responsables de la Consejería de Cultura han llevado a cabo una intervención para dar más lustre a algunas partes de la construcción.

En concreto, la inversión de la Junta asciende a 73.000 euros, que se han destinado a "la consolidación y la restauración del templo". La actuación más destacada se ha llevado a cabo en la portada de la iglesia y en su entorno más próximo. Así lo explicó este viernes la delegada territorial, Clara San Damián, que acudió a la zona para presenciar "in situ" los trabajos realizados y que se rodeó de varios técnicos que aclararon algunos detalles de la obra.

La delegada de la Junta resaltó "el compromiso" de la institución autonómica con el patrimonio cultural, y subrayó "el reconocimiento y puesta en valor" llevada a cabo por la Consejería en Santiago el Viejo: "Somos plenamente conscientes de lo que suponen estas inversiones en Zamora, donde el turismo es clave como motor económico y generador de empleo", reconoció San Damián, que tildó de "obligación" el hecho de "garantizar la conservación del patrimonio cultural, promover su investigación y enriquecimiento, así como fomentar y tutelar el acceso de los ciudadanos a estos bienes".

En ese sentido, Clara San Damián indicó que, a lo largo de estos últimos años, se han llevado a cabo dos intervenciones en la iglesia de Santiago el Viejo. Estos trabajos se han orientado a la conservación del monumento, y también a la mejora del entorno. La primera de las obras tuvo lugar en 2017, de la mano del programa Zamora Románica II, y consistió en la sustitución del alumbrado y la pavimentación del acceso.

Ya en las últimas semanas, se ha procedido a la consolidación y restauración de la portada, con un estudio petrológico previo, y la colocación de una marquesina. Además, según declaró a la agencia Efe el arquitecto responsable, Leocadio Peláez, sería positivo dar continuidad a estas intervenciones, y tratar las fachadas y retejar para seguir mejorando el estado del templo, que no corre peligro grave, pero que sí requiere de un mantenimiento constante para evitar posibles sustos.