La Comisión Europea aprobó ayer una inversión de 226 millones de euros a cargo del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder) para la línea de alta velocidad que unirá Madrid y Santiago de Compostela, en concreto para las obras del tramo entre la localidad zamorana de Lubián-Taboadela, cerca de Ourense (48,5 kilómetros). El Gobierno ha precisado, en cambio, que el plazo trasladado a Bruselas es "muy cauteloso y prudente" para garantizar la finalización de las obras y evitar problemas para captar los fondos europeos, de lo que se deduce que la puesta en servicio será antes.

Bruselas destaca que esta inversión servirá para potenciar la alta velocidad ferroviaria en el norte de España, al reducir los cuellos de botella, reducir significativamente los tiempos de viaje y aumentar la comodidad de los pasajeros y la frecuencia del servicio, informa Europa Press.

"El proyecto impulsará la economía local pero también la de la UE en general, porque es parte de la red transeuropea que conectará mejor el sudoeste de Europa con el resto del continente", destacó en un comunicado la comisaria de Cohesión, Elisa Ferreira. La Comisión destacó además que la inversión favorecerá el desarrollo de servicios de transporte "más seguros, rápidos y ecológicos". La UE tiene prevista una inversión de cerca de 2.800 millones de euros para mejorar las infraestructuras de red y el transporte de España en el marco de los Fondos Estructurales y de Inversión Europeos del periodo 2014-2020.