La presidenta de la Casa de Zamora en Madrid, Mari Luz Uña, intervino en el acto con los responsables de la Diputación Provincial para ofrecer una visión positiva sobre los cambios planteados por el nuevo equipo de Gobierno. "Nos hace mucha ilusión, porque todo lo que nos habéis explicado es por lo que habíamos estado luchando", aseguró la representante de la organización ubicada en la capital de España, que señaló que, en ocasiones, no habían podido proporcionar ni siquiera folletos a algún potencial visitante: "No teníamos", reconoció.

Sea como fuere, Uña compró la idea de "utilizar las sedes como oficina de turismo, tanto en Madrid como en las distintas provincias", y destacó que Zamora cuenta con "muchos y muy buenos productos" para vender en el exterior. "A nosotros nos resultaría agradable servir para esta promoción", indicó la responsable de la Casa de Zamora en la capital.

En cuanto a la nueva línea de subvenciones planteada por el presidente y el vicepresidente de la Diputación, Mari Luz Uña reconoció que "las sedes son costosas", por lo que vio con buenos ojos la posibilidad de recibir una mayor inyección económica. La representante de Madrid concretó las cifras y aseguró que, a pesar de tener el local en propiedad, su mantenimiento supone un coste de 1.200 euros mensuales, aparte de los 6.000 correspondientes al Impuesto de Bienes Inmuebles.

Asimismo, Mari Luz Uña afirmó que "estas Casas ya no son como antes", pero se mostró dispuesta a acoger "cualquier actividad que sea representativa de la provincia". "Nosotros somos gente altruista, pero dedicamos muchas horas para mantener viva la organización. Llevamos 90 años en Madrid y hacemos lo que podemos, celebramos todas las fiestas de Zamora y hacemos el pregón de la Semana Santa", enumeró la representante de la capital, visiblemente satisfecha con la nueva realidad que se dibuja en el horizonte.