La tradición manda -y en Zamora especialmente, debido al carácter barroco del desfile- y la cabalgata de los Reyes Magos de Oriente ha vuelto a iluminar las principales calles de la capital con Melchor, Gaspar y Baltasar como protagonistas absolutos del día -y de la noche- en un espectáculo organizado, un año más, por la Agrupación Belenista La Morana, que en las últimas ediciones ha logrado que los zamoranos retrocedan varios siglos para sentir que acompañan a estos reales personajes en su camino hacia Belén.

En esta ocasión han sido más de 700 personas las que hacen posible este mágico momento. De ellas, 500 son figurantes en un recorrido donde han desfilado integrantes de grupos de teatro, baile, danza o música de la ciudad, con la Banda de Zamora, la Banda de Música Maestro Nacor Blanco o la Banda de Bombos de Lerias. Además de los carteros reales y los pajes, también ha habido hueco para los heraldos a caballo, astrólogos y carboneros, que amenizan todo el recorrido y estregan a los niños dulces: cerca de 75.000 piruletas aptas para todos los paladares.

"Se trata de una cabalgata con un corte historicista y bíblico", detalla el presidente de la Agrupación Belenista La Morana, Francisco Iglesias, quien defiende esta versión de la habitual cabalgata "diferente y que llama muchísimo la atención por su puesta en escena, más apegada a la tradición", resume, al tiempo que agradece el apoyo de entidades como Gaza, Caja Rural, Unicaja y Centro Comercial Valderaduey para que los Reyes Magos regresen a Zamora un año más. Y para que todo transcurra sin incidentes, están muy pendientes los miembros de Bomberos de Zamora, Cruz Roja, Protección Civil o Zamora Limpia. Toda la ciudad volcada para cumplir los sueños de los más pequeños.

El propio alcalde de Zamora, Francisco Guarido, ha sido el encargado de recibir a la comitiva real, con parte de la corporación municipal y, tras dirigirse a los niños de Zamora, Melchor, Gaspar y Baltasar, para darles las últimas instrucciones de cara a la noche más mágica del año, el espectáculo ha finalizado con un castillo de fuegos artificiales. El alcalde ha pedido a los Magos "trabajo para los jóvenes de Zamora para que así pueda haber más niños". Y, además, que "nos deje industria en los zapatos".